Rijsenhouters con el rabo entre las piernas por culpa del ‘gato asesino’: "Primero el perro, luego tú."

«Ahora lo llamo el gato del kárate», dice Melissa Korfer, residente de Rijsenhout, que presenció un ataque del gato en enero. No lo ha vuelto a ver desde entonces, pero ahora incluso la policía tiene al gato en la mira.

La semana pasada, un gato atacó a un perro y a su dueño en el pasillo entre Boeierstraat y Zeilhof mientras caminaban. El perro resultó herido en la boca y el dueño tiene que conseguir unos vaqueros nuevos. Después de que un residente pidió que mantuvieran al gato adentro, el oficial de policía local visitó al dueño del gato a principios de esta semana.

El famoso gato gris atacó varias veces a un perro y a su dueño en el pasillo entre la calle Boeierstraat y el Zeilhof. Después de que el gato atacara nuevamente la semana pasada, los residentes locales lo llamaron el «gato asesino».

Ataques anteriores

El dueño de un labradoodle vio a su perro atacar al gato. La dueña se paró frente a su perro, pero al gato no le importó. Saltó contra la mujer y le clavó las uñas en los vaqueros. La mujer intentó sacudirse al gato y cayó al suelo. «Realmente era una película».

Para obtener una posible explicación del comportamiento del gato, NH llamó a Maaike de Smid, que trabajaba como terapeuta conductual de gatos. Según De Smit, el comportamiento agresivo en los gatos puede deberse al miedo o al dolor.



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