La lista de presos políticos rusos que desaparecen de sus celdas y parten con destino desconocido ha aumentado a ocho en tres días. El miércoles se anunció que Vladimir Kara-Murza, periodista británico-ruso y preso político que cumple una condena de 25 años de prisión en Rusia por «traición», ha desaparecido de su colonia penitenciaria en Siberia. Su abogado informó de ello a la agencia de noticias Reuters. Al menos siete disidentes le precedieron en los últimos días.
Según los analistas, el misterioso curso de los acontecimientos apunta a un posible intercambio de prisioneros inminente. El propio Kremlin no hace ninguna declaración al respecto.
El Kremlin y la Casa Blanca guardan silencio
Ivan Pavlov, un destacado abogado ruso de derechos humanos, dijo a Reuters que la desaparición de tantas personas con perfiles similares sugiere que las autoridades los están arrestando, posiblemente en Moscú, para un intercambio. Eso podría suceder en unos días, dice Pavlov.
El lunes y martes desaparecieron dos miembros del partido del fallecido Alexei Navalny, Lilia Chianysheva, Ksenia Fadejeva, el activista de derechos humanos Orleg Orlov, la artista Aleksandra Skochilenko, el destacado político de la oposición Ilya Yashin y el ruso-alemán Kevin Lick.
La abogada de Paul Whelan, un marine estadounidense que cumple una condena de dieciséis años de prisión en Rusia por «espionaje», afirmó el miércoles que tampoco sabía el paradero de su cliente. Estados Unidos exige su liberación desde 2018.
La Casa Blanca tampoco quiso decir nada sobre un posible intercambio y dijo el miércoles contra periodistas: «Creo que puedes entender que no queremos provocar nada que pueda alterar posibles resultados positivos».
Evan Gershkovich y Vadim Krasikov
Pero cualquiera que piense en un intercambio de prisioneros entre Rusia y Estados Unidos pensará primero en el periodista estadounidense Evan Gershkovich. El 19 de julio fue condenado a 16 años de prisión por espionaje. Ni el Kremlin ni la Casa Blanca han dicho nada sobre él y hasta donde sabemos no ha sido trasladado de su celda. Rusia también está deteniendo a más estadounidenses de los que no se ha sabido nada más, entre ellos un periodista ruso-estadounidense de Radio Europa Libre y un ex profesor.
Se sabe que Rusia exige la liberación de, entre otros, Vadim Krasikov, un ruso que cumple cadena perpetua en Alemania por asesinato. Estados Unidos también mantiene bajo custodia al menos a dos rusos que serían elegibles para un intercambio, ambos procesados por delitos cibernéticos graves.