A los italianos todavía les encanta pagar en efectivo y retirar mil millones de euros al día de los cajeros automáticos. E incluso si el uso de tarjetas de crédito o prepago está creciendo, sigue estando muy por debajo de la media europea. La fotografía fue tomada por el centro de investigación Unimpresa, según la cual en 2023 se retiraron 360 mil millones de euros de los cajeros automáticos, 10 mil millones más que en 2022 y 18 mil millones más que en 2021.
Italia es el último país de la eurozona que utiliza instrumentos distintos del efectivo
La pandemia, por tanto, no parece haber acabado por completo con el uso del efectivo, sino todo lo contrario. Nuestro país – según el estudio – se confirma como el último país de la zona del euro en cuanto al uso de instrumentos de pago distintos del efectivo: con sólo 200 transacciones medias per cápita realizadas con tarjetas de crédito, transferencias bancarias y cheques, Italia se muestra muy aficionada al papel. dinero. La media de la eurozona para pagos alternativos al efectivo – se explica – es de 370 transacciones por ciudadano, donde España registra 290, Alemania 329 y Francia 424. Los Países Bajos (670) y otros países del Norte obtienen mejores resultados, como Finlandia (598). ) y Estonia (488).
Las tarjetas prepago están creciendo
En detalle en Italia, en materia de moneda virtual y pagos digitales, el año pasado las operaciones alcanzaron los 11 mil millones de euros entre transferencias bancarias (que cubren el 94% de este sector), cheques y giros bancarios, y tarjetas de crédito o deuda. El dinero plástico se utiliza más que en el pasado: 426 mil millones de euros en transacciones en 2023 frente a 382 mil millones de euros en 2022, es decir, 44 mil millones de euros más en un año (+11,5%). Y la circulación también está aumentando significativamente: hay más de 120 millones de tarjetas en circulación, incluidas tarjetas de crédito (21 millones), tarjetas de débito (67 millones) y tarjetas prepago (33 millones). También aquí nos enfrentamos a un crecimiento, más de 5 millones de partidas más entre 2022 y 2023 (+4,5%): en particular, hay 300.000 tarjetas de crédito más (+1,4%), las de 2,7 millones más de deuda (+4,2%) y las tarjetas prepago, que los padres regalan cada vez más a sus hijos menores para gestionar su dinero de bolsillo semanal, crecieron en 2,1 millones (+7,1%).
Opciones alternativas
«Los pagos digitales – explica la presidenta de la Unimpresa Giovanna Ferrara – ofrecen indudables ventajas en términos de comodidad y seguridad. Permiten transacciones rápidas y a menudo rastreables, lo que reduce el riesgo de robo o pérdida de dinero. Sin embargo, es fundamental que la adopción de estas herramientas se produzca de forma voluntaria y consciente, sin imponer un abandono forzado del efectivo. La elección de cómo pagar debe dejarse en manos de los individuos, respetando sus preferencias y necesidades”.