El precio por el club londinense en torno al técnico Thomas Tuchel y los internacionales de la DFB Timo Werner y Kai Havertz es de 4.250 millones de libras (casi cinco mil millones de euros). El gobierno enfatizó que se aseguró que el dinero no beneficiaría al dueño anterior, Roman Abramovich. Más bien, el objetivo es apoyar a las víctimas de la guerra en Ucrania.
El oligarca ruso había sido sancionado por la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania. La Premier League había aprobado previamente el acuerdo.
El futuro del Chelsea era incierto por las sanciones a Abramovich
«Anoche, el gobierno del Reino Unido llegó a una posición en la que podemos emitir una licencia que permita la venta del Chelsea Football Club», dijo el comunicado del gobierno. «Después de la sanción de Roman Abramovich, el gobierno ha trabajado duro para garantizar que el Chelsea Football Club pueda seguir jugando al fútbol. Sin embargo, siempre hemos entendido que el futuro a largo plazo del club solo puede asegurarse con una nueva propiedad».
El futuro del club había sido incierto por las sanciones contra Abramovich. Se necesitaba la aprobación del gobierno y de la liga porque los activos del oligarca ruso habían sido congelados.
Detrás del consorcio de compradores se encuentran la estadounidense Boehly, quien también es copropietaria del equipo de béisbol Los Angeles Dodgers, el multimillonario suizo Hansjörg Wyss y el empresario estadounidense Mark Walter. Sin embargo, es probable que la participación más grande en el club londinense la tenga el inversionista estadounidense Clearlake Capital en el futuro.
Fuente: dpa