El gobierno “seguirá monitoreando la situación económica y se reserva el derecho de intervenir para seguir apoyando a las familias y al sistema productivo”. Así lo dijo el ministro de Economía, Daniele Franco, en el turno de preguntas en la Cámara. Respondiendo a una pregunta, Franco explicó que elevar el techo del Isee a 30.000 euros para obtener el bono social en las facturas ampliaría la audiencia actual hasta un tercio de las familias, y “implicaría una carga muy elevada y difícil de cubrir” para la Expresar. En cambio, se puede lograr “un uso más equitativo de los recursos” “con intervenciones específicas en apoyo de los grupos más débiles”.
Más ingresos por cumplimiento tributario con recortes de impuestos
“Los mayores ingresos estructurales de 2018 fueron valorados por la comisión encargada de elaborar el informe de economía en más de 4.300 millones para el ejercicio fiscal 2018. Los mayores ingresos de cumplimiento tributario contribuyeron a mejorar las previsiones de tendencia de los ingresos también en años posteriores y estas tendencias fueron incorporadas al Nadef, en esa ocasión el gobierno confirmó su intención de utilizarlas para reducir la carga tributaria en el marco de la ley de presupuesto”. “Algunas valoraciones preliminares parecen confirmar una tendencia de mejora en el cumplimiento tributario también en los ejercicios fiscales posteriores a 2018. Estas valoraciones sólo podrán confirmarse con motivo de la elaboración del Nadef 2022. Para Franco “de hecho habrá que esperar”. para la actualización de la comisión encargada de elaborar el correspondiente informe para el ejercicio fiscal 2019. Las previsiones de los ingresos tributarios de las Administraciones Públicas reportadas en la Def 2022 también señalan un incremento de casi 9.000 millones respecto a los ingresos estimados en el Nadef 2021. Si los objetivos programáticos de las finanzas públicas -explicó el ministro- los cambios positivos permanentes en el cumplimiento tributario aún pueden estar destinados a reducir la carga tributaria». Si bien excluye los mecanismos automáticos de asignación de recursos al fondo, el mecanismo actual “no excluye en modo alguno la posibilidad de que, una vez aceptado el carácter estructural de la recuperación de ingresos, pueda utilizarse para reducir la carga tributaria”.