Probablemente algunas personas piensen que algo así puede pasar. Otros probablemente serían más críticos con la elección de ropa de un esquiador de fondo sueco.
Hay prendas que son demasiado grandes, demasiado holgadas o, en este caso, demasiado ajustadas. El esquiador de fondo sueco Gustaf Berglund cometió un pequeño paso en falso al elegir su ropa de competición.
La “escena del crimen”: la carrera del Mundial en Goms (Suiza). En una foto, se puede ver a Berglund posando casualmente. Bastante discreto a primera vista, un poco más picante a segunda vista. Porque bajo el traje ceñido se pueden ver las siluetas de su mejor pieza.
El deportista se limitó a decir al periódico sueco «Expressen»: «Sí, puedo ver en la foto posterior que hubo un pequeño error en la elección de la ropa». Y además: «¡Mierda! Debería haberme llevado el cortavientos. Era bastante obvio lo que se escondía debajo del mono de carreras. Pero es la realidad».
Al final, Berglund no tuvo mayores problemas con la foto que la Federación Sueca de Esquí publicó en Instagram, porque también hubo comentarios positivos, como reveló: «Hubo algunas personas que se acercaron, aplaudieron y felicitaron».