La relación entre ambos ya era tensa cuando el ultraliberal Milei describió al Papa durante la campaña electoral como un «tonto» y un «bastardo» que promovía el comunismo en todo el mundo. Pero mientras tanto ya ha enviado una invitación para una visita de Estado. El Papa Francisco no ha viajado a Argentina desde el inicio de su pontificado en 2013.
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El saludo fue muy cálido: el Papa, que estaba en silla de ruedas, y Milei se agarraron del hombro. Está prevista una audiencia privada para el lunes. Por tanto, Milei se reunirá con la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, y con el presidente Sergio Mattarella.
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