Si bien la Administración Nacional de Prensa y Publicaciones (NPPA) había decidido reforzar su control en el sector de los videojuegos, el regulador chino anunció el 23 de diciembre que los “estudiaría seriamente”. De hecho, muchos actores de este ecosistema creen que estas medidas bien podrían haber…
Si bien la Administración Nacional de Prensa y Publicaciones (NPPA) había decidido reforzar su control en el sector de los videojuegos, el regulador chino anunció el 23 de diciembre que “ estudiaría en serio “. De hecho, muchos actores de este ecosistema creen que estas medidas podrían tener un impacto en su facturación.
Apoyar a la industria de los videojuegos y regularla
Apenas un día después de anunciar nuevas restricciones a los jugadores de videojuegos en línea, la NPPA dijo que podría revertir las medidas. No en vano, cuando se anunciaron estos dos gigantes chinos, Tencent y NetEase, vieron caer su valor de mercado en varias decenas de miles de millones de dólares. El precio de Tencent cayó más de un 15% en la Bolsa de Hong Kong, mientras que el de NetEase se desplomó más de un 20% en Nueva York.
Los accionistas vendieron rápidamente sus acciones por temor a su depreciación. De hecho, las restricciones apuntan particularmente a las compras de videojuegos dentro de la aplicación que permiten a los jugadores personalizar su avatar o tener acceso a contenido exclusivo. Aunque la NPPA no había proporcionado ningún detalle sobre el tipo de limitación que impondría, los actores de la industria saben que dicha restricción tendrá un impacto significativo en los ingresos.
En respuesta a las preocupaciones sobre las medidas, la NPPA aseguró que “ “Consideraría seriamente las preocupaciones y opiniones expresadas” y que modificaría aún más las reglas después de tener en cuenta las opiniones de agencias gubernamentales, empresas y usuarios afectados. “. Tiene hasta el 22 de enero de 2024 para recopilar comentarios de las distintas partes interesadas con el fin de formarse un juicio final.
El 25 de diciembre, Beijing amplió la lista de videojuegos autorizados en el territorio, incluyendo 105 nuevos títulos de videojuegos, seis meses después de la última ampliación. Gran parte de ellos son precisamente explotados por Tencent y NetEase, las dos empresas más afectadas por el anuncio de las medidas represivas. Una forma de que las autoridades chinas demuestren que apoyan el desarrollo del sector de los videojuegos, a pesar de las restricciones.
Desde hace varios meses, Tencent se ve gravemente afectada por estas medidas. En el segundo trimestre de 2023 su actividad relacionada con los videojuegos no avanzó, alcanzando apenas los 4.000 millones de euros. Esto obligó al gigante tecnológico chino a despedir a varios miles de empleados, pero también a diversificar sus actividades, centrándose en la publicidad, las fintech e incluso la inteligencia artificial. La firma también apuntó al mercado internacional recuperando los derechos de desarrollo y publicación de la versión móvil del esperado juego multijugador de Bandai Namco. Protocolo azul.