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Turquía ha bloqueado el acceso a Instagram después de acusar a la plataforma de redes sociales con sede en Estados Unidos de censurar publicaciones sobre el asesinato del líder político de Hamas, Ismail Haniyeh.
La Autoridad de Tecnologías de la Información y la Comunicación del país comenzó a restringir el acceso a Instagram el viernes, pero otros servicios de la empresa matriz Meta, incluidos Facebook y WhatsApp, siguen siendo accesibles.
Fahrettin Altun, jefe de comunicaciones de Turquía y asesor principal del presidente Recep Tayyip Erdoğan, condenó el miércoles a Instagram por supuestamente “impedir que la gente publique mensajes de condolencias por el fallecimiento del líder de Hamás, Haniyeh”. “Esto es censura, pura y simple”, añadió.
Meta no respondió a una solicitud de comentarios.
La decisión de Ankara de bloquear Instagram, una plataforma ampliamente utilizada en Turquía, se produce en un momento en que el país ha intensificado sus críticas a Israel y sus partidarios por la guerra en Gaza, que según los líderes israelíes tiene como objetivo eliminar al grupo militante Hamás después de su ataque del 7 de octubre. Turquía ha prohibido el comercio con el estado judío y lo ha acusado repetidamente de llevar a cabo un genocidio en Gaza.
Turquía también ha mostrado su apoyo a Hamás, que gobierna Gaza. Erdoğan calificó el asesinato de Haniyeh en Teherán el miércoles, del que Irán ha atribuido a Israel, como “un acto despreciable destinado a perturbar la causa palestina, la gloriosa resistencia de Gaza y la justa lucha de nuestros hermanos palestinos”.
El líder turco, en una llamada con el presidente estadounidense Joe Biden el jueves por la noche, expresó su “profunda decepción” con Estados Unidos por recibir al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, en el Congreso el mes pasado. En respuesta, Ankara invitó al presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abás, a dirigirse al parlamento turco a mediados de agosto.
La decisión de Turquía de restringir Instagram es también la última señal de que el gobierno de Erdoğan utiliza la censura de Internet como herramienta política en un momento en que los observadores están preocupados de que el país se esté deslizando hacia la autocracia.
Según la Asociación Turca de Libertad de Expresión (İFÖD), en los últimos años ha aumentado drásticamente el número de sitios web nacionales y extranjeros censurados o cerrados por las autoridades turcas: a principios de 2024 había alrededor de un millón de nombres de dominio completamente bloqueados, frente a los 350.000 que había a finales de 2018.
Los censores turcos bloquean una amplia gama de contenidos, incluidos sitios web completos de algunos proveedores de noticias, como la cadena alemana Deutsche Welle, así como publicaciones en redes sociales y vídeos de YouTube. Los temas censurados varían mucho, pero incluyen artículos críticos con Erdoğan y su familia, sitios web prokurdos y de la oposición y material considerado obsceno o criminal, según İFÖD.
En enero, el gobierno intentó restringir los servicios de redes privadas virtuales, que se utilizan ampliamente para eludir la censura, en el período previo a las elecciones locales de marzo. Turquía también amenazó con prohibir X a principios de 2024 después de que la plataforma se negara a eliminar varias publicaciones polémicas, y la red social de Elon Musk finalmente cedió.