Es ruidoso en las aulas del colegio Esdal en Oosterstraat en Emmen, pero la mayoría de los estudiantes están muy concentrados en pintar su propio cartel. “Es bastante difícil”, dice Djurdjina. Está parada en una mesa con Esmee y Sharon, donde las tres están trabajando en su propia “pieza” de Van Gogh. “A todos nos han dado un cuadrado, donde tiene que venir una pequeña parte del retrato”, explica en conversación con SO!34† Todas estas piezas juntas pronto deberían convertirse en un todo.