Tata Steel quiere que su fábrica en IJmuiden funcione de manera más limpia a más tardar en 2029. Según Tata, los planes para fabricar acero más sostenible costarán miles de millones de euros. La empresa quiere que el gobierno ayude a pagar esto.
Tata quiere sustituir uno de sus altos hornos y una planta de coque que funcionan con carbón contaminante. Así se recoge en los planes modificados de la empresa siderúrgica.
La empresa no quiere decir cuánto dinero quiere del gobierno para los planes ajustados. Según Hans van den Berg, director general de la filial holandesa, se están manteniendo conversaciones al respecto con el Ministerio de Asuntos Económicos y Clima. Según él, la empresa quiere apoyo para acelerar el proceso de concesión de licencias.
Tata ahora tiene dos de ambas instalaciones. La compañía quiere sustituirlos por una instalación que funcione primero con gas natural y después con hidrógeno verde. La instalación, llamada Planta de Hierro de Reducción Directa (DRP), funcionará con hidrógeno “tan pronto como esté disponible en cantidades suficientes y al precio adecuado”. No se sabe cuándo será posible.
El DRP se combina con una instalación que permite a la empresa fundir chatarra del DRP. Esta instalación haría a Tata mucho más circular y menos dependiente de materias primas fósiles. La empresa quiere aumentar el uso de chatarra del 17 por ciento al 30 por ciento de la producción total anual a partir de 2030.
Tata’s ijzeren greep
In de NU.nl-podcast Tata’s ijzeren greep zoeken we uit hoe het kan dat we nu ineens zoveel horen over de IJmuidense staalfabriek, terwijl die er al meer dan honderd jaar staat. Heeft de overheid genoeg gedaan om milieuvervuiling door de fabriek tegen te gaan, of ging het economisch belang toch voor? En hoe moet het nu verder met de grootste uitstoter van Nederland?
De serie wordt gepresenteerd door NU.nl-klimaatverslaggever Jeroen Kraan en Qmusic-nieuwslezer Anne-Marie Rozing.
Los residentes locales tienen más probabilidades de enfermarse
Los habitantes de Tata llevan años sufriendo las consecuencias de las emisiones de la empresa. En septiembre, el RIVM concluyó después de una investigación que las emisiones hacen que las personas en ese entorno tengan una esperanza de vida más corta y que tengan un mayor riesgo de enfermarse debido a las emisiones.
Los residentes locales demandaron a Tata por la emisión de sustancias nocivas. Más de 38.000 personas han firmado una petición pidiendo el cierre de las zonas repugnantes de la fábrica de acero.
Tata presentó el viernes sus nuevos planes al Ministerio de Asuntos Económicos y Política Climática. El Ministro Micky Adriaansens (Economía) anunció el mes pasado que evaluaría “críticamente” los planes modificados. Ella hace que dos asesores externos investiguen las alternativas.
Anteriormente, Tata quería fabricar acero con hidrógeno verde producido por turbinas eólicas marinas, pero la empresa decidió no hacerlo el verano pasado. El hidrógeno verde garantiza menos emisiones de CO2 y partículas. La empresa detrás del complejo de altos hornos en IJmuiden quiere emitir 5 millones de toneladas menos de CO2 al año a partir de 2030.