La presidenta ha hecho todo lo posible por lograr el equilibrio de género: ha pedido a todos los países que indiquen dos nombres de posibles comisarios, uno femenino y otro masculino. Sin embargo, los gobiernos, incluido el nuestro, se sintieron libres de ignorar la solicitud.

Hay un efecto dominó, una onda expansiva que va más allá del individuo. Cuando una mujer deja su trabajo, no sólo pierde su estabilidad económica, sino que también reduce la diversidad y el equilibrio de género en el mercado laboral. Las empresas, a su vez, suelen ofrecer menos contratos estables a las mujeres, percibidas como más «en riesgo» de dejar el trabajo por motivos familiares.

En los Juegos Olímpicos de París 2024 se logró por primera vez el objetivo de la igualdad de género. Un resultado verdaderamente notable, teniendo en cuenta que en Atenas en 1896, los primeros Juegos Olímpicos modernos, las mujeres no participaron