Son vibraciones de baja frecuencia, como las que producen únicamente animales enormes, con cuerdas vocales muy largas (como los elefantes). Pero, ¿cómo los producen los gatos, que son tan pequeños? Un nuevo estudio lo explica. Lo que también revela su carácter involuntario.

Los elefantes siempre tienen razón

La sensibilidad de la opinión pública ha cambiado: ver tigres y elefantes hacer cosas raras ya no interesa a mucha gente. En Francia, un domador acaba de ser severamente sentenciado. En Italia siguen actuando animales en los circos. Es hora de decir basta. ¿O no?