El secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, fue trasladado nuevamente el domingo a un hospital en Washington tras «síntomas compatibles con un problema de vejiga». El Pentágono informa esto.
Austin había regresado a trabajar en el ministerio desde el 29 de enero. Anteriormente, había trabajado desde casa durante varias semanas después de un ingreso hospitalario. Hubo mucho revuelo por esa hospitalización, de la que Austin no había informado al presidente Joe Biden ni al Congreso, el parlamento estadounidense.
En diciembre, Austin se sometió a una cirugía por cáncer de próstata. Tras complicaciones, el ministro de Defensa ingresó en el hospital para recibir tratamiento el 1 de enero. Austin no informó a la Casa Blanca de su ingreso hasta el 4 de enero, y Biden no se enteró de su diagnóstico de cáncer de próstata hasta el 9 de enero.