Paul Drux fue uno de los jugadores de defensa más talentosos de Alemania. Pero el dinámico derecho luchó contra las lesiones a una edad temprana. Un problema que ahora le está costando su carrera.
El jugador nacional de balonmano Paul Drux debe poner fin a su carrera. Así lo anunció su equipo, el Füchse Berlin, el miércoles. El zaguero, de sólo 29 años, sufrió una grave lesión en la rodilla durante el entrenamiento de la semana pasada, lo que le obligó a tomar esta decisión.
“Los médicos descartan volver a los deportes competitivos”, dijeron los Foxes. Drux, 127 veces jugador nacional y medallista de bronce olímpico en Río de Janeiro en 2016, ahora tiene que tomar un camino profesional diferente.
El propio Drux describió los resultados de los exámenes como “muy devastadores” y añadió: “Ahora tengo que procesarlo por mí mismo. Estoy muy agradecido por lo que pude vivir y lograr en el balonmano activo como jugador”.
Los zorros lamentan la partida prematura de su dinámico luchador. “Casi ningún jugador ha marcado tanto la historia del Füchse Berlin como Paul Drux. Los responsables están aún más sorprendidos por los hechos actuales”, afirma el club.
Drux juega para los berlineses desde la categoría juvenil B, ganó la Copa DHB y la Supercopa de Alemania con el Füchsen y también es capitán del equipo desde hace algunos años. Esta posición ahora será asumida por otro jugador.
El director general Bob Hanning siente lástima por Drux: “Me duele muchísimo que Paul tenga que terminar su carrera de esta manera”. Aún no está claro qué hará el joven de 29 años en el futuro. “Después de la próxima operación y rehabilitación, ahora pensaré tranquilamente en los próximos pasos junto con mi familia”, dijo Drux.