La escasez nacional de voluntarios también afecta al santuario de aves en Erica. La Fundación World of Birds es el único refugio grande para pájaros en los Países Bajos y tiene casi dos mil. “Desafortunadamente, en este momento no tenemos la gente para cuidar más animales”, dice el fundador Michel van der Plas. Es por eso que hay una parada de grabación.
“Probablemente no habrá más espacio para nuevos animales hasta fin de año”, dice el fundador Michel van der Plas, mientras camina por el invernadero del refugio. No hay un momento de silencio a su alrededor. Mientras camina, varios loros lo siguen a través de los barrotes del desván. “Son animales muy inteligentes y curiosos”, dice Van der Plas.
Hace más de 25 años comenzó a cuidar papagayos, ahora un pasatiempo que se le fue de las manos. El refugio ha estado en Erica durante varios años y no solo aceptan loros, sino todo tipo de aves. Algunos permanentemente, otros solo porque los dueños están de vacaciones. “Cada vez más personas pueden encontrarnos ahora, también porque somos el único refugio grande en los Países Bajos”.
El número de voluntarios no crece con el número de aves. Es por eso que el albergue tomó la decisión de detener las admisiones. “Una elección difícil, pero la única”, explica el presidente.