Ökotest compró 34 sprays desodorantes perfumados con aromas frescos. Nueve de ellos son cosméticos naturales certificados. El rango de precio de 75 mililitros es de 36 céntimos a 7,64 euros.
Con base en las listas de ingredientes obligatorios para los fabricantes, los evaluadores compararon si los fabricantes usaban ingredientes controvertidos y/o cuestionables como derivados de PEG/PEG, compuestos plásticos como siliconas o el antioxidante butilhidroxitolueno (BHT) en los desodorantes. En el laboratorio, Ökotest hizo analizar los productos en busca de separadores de formaldehído/formaldehído, fragancias que provocan alergias, fragancias de almizcle artificial, el agente desnaturalizante ftalato de dietilo (DEP) y el controvertido grupo de sustancias de compuestos orgánicos halogenados. Un laboratorio buscó PVC/PVDC/compuestos clorados perjudiciales para el medio ambiente en el embalaje.
Para los desodorantes con una duración de acción anunciada explícitamente de 24 o 48 horas, Ökotest solicitó a los proveedores pruebas relevantes. Si los proveedores luego no presentaban un estudio, no podían obtener más que “inadecuado” en el resultado de la prueba Más defectos. Ökotest también dedujo calificaciones en las que faltaban los resultados individuales de las diversas materias o en las que se notaron puntos débiles particulares en el estudio.
Fuente: Ökotest