El martes 5 de marzo, Meta anunció que cortaría lazos con sus revendedores de publicidad autorizados, los socios de ventas autorizados (ASP). Estos ASP operan hoy como extensiones locales de los servicios comerciales de Meta, distribuidos globalmente entre siete empresas asociadas. Proporcionan a los clientes publicitarios de Meta asistencia y apoyo en direcciones estratégicas.
A partir de julio, el grupo tomará las riendas del trabajo realizado por estas ramas. Se favorecerá así una relación sin intermediarios con todos los clientes publicitarios. El objetivo anunciado por Meta es armonizar su modo operativo en todo el mundo. «Evaluamos y adaptamos periódicamente nuestro servicio de atención al cliente», afirmó un portavoz de Meta, informado por el Wall Street Journal.
Para Entravision Communications, que es el proveedor de Meta en algunos países de Centro y Sudamérica, así como en Islandia y Mongolia, el anuncio representa la pérdida de su principal cliente. En 2023, el grupo de Mark Zuckerberg representó el 50% de su facturación. La empresa, que fue informada de la rescisión del contrato la víspera del anuncio oficial, el 4 de marzo, se ve así obligada a revisar su funcionamiento y su política financiera. «Estamos trabajando para que esta transición sea lo más fluida posible», dijo el portavoz de Meta.