Nadie ha saltado más lejos que él, pero él tampoco tanto como le gustaría. El saltador de longitud Markus Rehm ganó el miércoles (4 de septiembre de 2024) el oro en los Juegos Paralímpicos por cuarta vez, pero se quedó muy por debajo de los nueve metros, lo que sigue siendo su gran sueño.
Como en casi todas sus competiciones, su victoria en la clase T64 nunca estuvo en peligro en París. Su primer salto de 7,83 metros habría sido suficiente para ganar la medalla de oro, aunque la distancia no cumplía con los requisitos del hombre de 36 años. Sin embargo, Rehm tampoco logró mejorar de manera notable. No se acercó a su mejor marca de la temporada de 8,44 metros ni a su distancia de la Copa del Mundo de 8,30 metros. Su salto más largo fue “sólo” de 8,13 metros.
El compañero de equipo de Rehm, Noah Bodelier, se quedó sin medalla; con 6,98 metros acabó sexto, a 51 centímetros del podio. La plata fue para Derek Loccident (EE.UU./7,79), el bronce fue para su compatriota Jarryd Wallace (7,49). El titular del T44, Mpumelelo Mhlongo (Sudáfrica), realizó una gran competencia, saltando un récord mundial de 7,12 metros en su clase y quedando quinto.
“Muchas veces he soñado con ser la primera persona en alcanzar los nueve metros”
De antemano, Rehm incluso había vuelto a poner sobre la mesa su gran sueño de salto de longitud. El poseedor del récord mundial (8,72 metros) todavía tiene el objetivo de superar la marca de los nueve metros y aparentemente eligió París y los Juegos Paralímpicos como la oportunidad perfecta para lograrlo. Sólo llegó con la mejor marca de la temporada de 8,44 metros. el es esta temporada “Muy lejos del salto perfecto” había admitido de antemano.
Ahora ha ganado la medalla de oro en los Juegos Paralímpicos por cuarta vez y se mantiene invicto en el decimocuarto año de su carrera internacional. Pero Rehm, a quien incluso se le permitió participar en la ceremonia inaugural como corredor de la antorcha, aún no ha podido superar el último obstáculo. “Muchas veces he soñado con ser la primera persona en alcanzar los nueve metros”había dicho antes. Esto no se hizo realidad en París, pero sí el siguiente triunfo del destacado paraatleta alemán.