Friedman no es el primero. Ya ha ganado un prestigioso premio Pulitzer en tres ocasiones: dos por sus reportajes en el extranjero y una por sus artículos de opinión en ‘The New York Times’.
En una columna que escribió esta semana sobre la controvertida visita de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, a Taiwán, también se mencionó la guerra en Ucrania. Según él, esa guerra está lejos de terminar y hay una “profunda desconfianza” de EE.UU. hacia Zelensky.
“En conversaciones privadas, los funcionarios estadounidenses están mucho más preocupados por el liderazgo en Ucrania de lo que revelan abiertamente”, escribe Friedman. “Existe una profunda desconfianza entre la Casa Blanca y el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, considerablemente más profunda de lo que se informa”.
Se refiere, entre otras cosas, a las “cosas extrañas” que están pasando en Kiev. Zelensky, por ejemplo, despidió repentinamente a dos figuras clave de sus servicios de seguridad el 17 de julio. Eran Ivan Bakanov, quien ha encabezado el servicio secreto ucraniano desde 2019, e Irina Venediktova, quien era la Fiscal General. Venediktova también dirigió la investigación de más de 18.000 casos de presuntos crímenes de guerra.
Nunca se dio una razón para la doble renuncia. “Como si no quisiéramos mirar demasiado bajo el capó en Kiev por temor a la corrupción o las payasadas que podamos ver”, dijo Friedman.