VeriSignla empresa responsable de asignar los nombres de dominio .com, se enfrenta a graves acusaciones por sus prácticas de fijación de precios. los senadores Elizabeth Warren Y Jerry Nadler han pedido una investigación federal sobre lo que describen como prácticas de fijación de precios “depredadoras” en la gestión de direcciones web .com.
Acusaciones de monopolio de precios
Elizabeth Warren y Jerry Nadler enviaron una carta al Departamento de Justicia y a la Administración Nacional de Información y Telecomunicaciones (NTIA), una rama del Departamento de Comercio de Estados Unidos, acusando a VeriSign de utilizar su posición dominante para cobrar de más a los clientes que deseaban registrar dominios .com. Afirman que “VeriSign explota su poder de monopolio para cobrar precios excesivos a millones de usuarios”. La legislación actual permitiría a VeriSign mantener este dominio a través de acuerdos específicos con estas agencias gubernamentales.
La respuesta de VeriSign a las acusaciones
En un comunicado emitido por el portavoz de VeriSign, David McGuire, la compañía cuestiona las acusaciones, calificándolas de “distorsionadas por imprecisiones fácticas y malentendidos de conceptos técnicos”. VeriSign asegura que gestiona sus servicios de acuerdo con la normativa vigente y rechaza la idea de ser un monopolio, destacando la existencia de más de 1.200 dominios genéricos alternativos como .org, .shop, .ai y .uk.
Es revelador que fondos sustanciales provenientes del registro de nombres de dominio se utilicen para recomprar acciones en lugar de invertir en mejorar la infraestructura o los servicios. En 2023, VeriSign habría dedicado $882 millones para recomprar acciones, acentuando las críticas a la manipulación financiera destinada a aumentar artificialmente el valor de sus acciones en lugar de crecer orgánicamente a través de mejoras en los servicios.
Las implicaciones de una renovación de contrato
Un aspecto crucial reside en la renovación de los contratos entre VeriSign y las autoridades americanas, en particular la NTIA. Este acuerdo, que otorga derechos exclusivos a VeriSign para operar el dominio .com, expirará pronto. La decisión de renovar o no este acuerdo se encuentra actualmente en el centro de una intensa controversia política.
En junio pasado, varios grupos de activistas expresaron sus preocupaciones a las autoridades responsables, afirmando que “ICANN y VeriSign operan como un cártel de facto, y la NTIA debería dejar de sancionar este ‘triángulo legal incestuoso'”. Esta posible colusión revela fallas sistémicas en la supervisión y el cumplimiento regulatorio de las empresas con monopolios digitales.
El controvertido papel de la NTIA
La NTIA, dirigida por Alan Davidson, ex lobbysta de Google, desempeña un papel clave en la supervisión de estos acuerdos. Los informes indican un conflicto entre la NTIA y la división Antimonopolio del Departamento de Justicia sobre cuán agresivos deben ser en las negociaciones con VeriSign. Mientras que a la NTIA le gustaría renovar el contrato en las condiciones actuales, la división Antimonopolio presionaría para una reducción de los precios o incluso la reapertura de la licitación.
Críticas a administraciones anteriores
Las decisiones políticas pasadas también están bajo fuego. La administración Trump firmó un acuerdo en 2018 que eliminaba el límite de precio impuesto a VeriSign, una medida que se consideraba que favorecía los intereses corporativos a expensas de los consumidores. Hoy en día, la perspectiva de un retorno a medidas más estrictas genera la esperanza de regulaciones más justas para limitar el poder monopólico ejercido por VeriSign.
Con los términos del acuerdo con la NTIA llegando a su fin, queda por ver si los legisladores actuarán para desafiar la estrategia de precios de VeriSign. El contexto político actual y la presión pública podrían influir significativamente en la decisión final, redefiniendo potencialmente el panorama de la gestión de nombres de dominio de Internet.