Pocos (o muy pocos) ricos, millones y millones de pobres. Luego muchos otros que no son ni ricos ni pobres. La “pirámide” fiscal parece tener una estructura bastante similar en todos los países: en la parte superior, en la parte superior de la pirámide, hay un puñado más o menos grande de contribuyentes muy ricos y decididamente ricos, en términos de ingresos declarados (activos , obviamente , es otra cosa). Bajando, hay un grupo de individuos/familias que tienen menos (o mucho menos) que los ricos, pero que “les va bien”. Luego, más abajo, en la base de la pirámide, nos encontramos con una multitud de personas que viven con poco, a veces con muy poco.
Los datos recogidos en la encuesta de Il Sole 24 Ore del Lunedì sobre los ingresos declarados en algunos países confirman, aunque con algunas distinciones, una concentración muy fuerte de contribuyentes en los tramos de ingresos más bajos. En Italia, el 56% de las declaraciones de impuestos muestran un ingreso total de menos de 20 mil euros. Y siempre es un cierto efecto recordar que hasta 94 italianos de cada 100 tienen una renta individual que no supera los 50 mil euros: la alta incidencia de las rentas del trabajo y de la jubilación ciertamente pesa mucho.
En Francia, el 52% de las declaraciones están por debajo de los 20 mil euros (se trata de personas físicas o familias fiscales, como marca la ley) pero ningún país es peor que España: casi el 60% de los contribuyentes no superan los 21 mil euros de renta declarada.
Las proporciones cambian en los países con mayor número de ricos, que muestran una menor aglomeración de contribuyentes en las clases de menores ingresos. En Alemania, por ejemplo, el 36,9% de los sujetos – equivalente a 15,3 millones – tienen una renta inferior a 20 mil euros y hasta 50 mil se encuentran alrededor del 75% de los contribuyentes. Cabe señalar el caso de Gran Bretaña: la mayor concentración de contribuyentes no se encuentra en el rango de hasta 20.000 libras (33,6%), sino en el rango de 20.000 a 50.000 libras, donde se sitúa más de uno de cada dos contribuyentes.
En consecuencia, en estos países hay una presencia más significativa de contribuyentes en las clases centrales de ingresos, aproximadamente de 70 mil a 150-200 mil euros (u otras monedas) de ingresos. Alemania, entre 70 y 125 mil euros, sigue acaparando el 10% de los contribuyentes (parejas o solteros); Suiza tiene el 25% de sujetos entre 70.000 y 200.000 francos, lo mismo que Estados Unidos, que tiene más de 36 millones de contribuyentes con ingresos entre 75.000 y 200.000 dólares, más de una quinta parte del total. En Italia, por encima de los 70 mil estamos algo más del 2%, al nivel de España pero bastante lejos de Austria y Francia (que, como se ha dicho, grava el vestíbulo fiscales decir, el “núcleo fiscal”).