El nuevo edificio está situado justo a las afueras de la carretera de circunvalación de Torhout, en la zona industrial, lo que le otorga una ubicación ideal. Desde allí, los agentes pueden llegar a cualquier lugar con bastante rapidez. Y esto es necesario porque la policía local trabaja en una vasta zona con Torhout como ciudad escolar y dos aparcamientos en la carretera que atraen a los traficantes de personas.
Desde la nueva oficina, la zona de Kouter quiere abordar de forma más eficaz tanto los fenómenos locales como la delincuencia internacional. «Antes estábamos distribuidos en siete edificios, lo que, por supuesto, no mejoró en absoluto la comunicación. Ahora todos los servicios están perfectamente juntos, las reuniones son más fluidas, la comunicación es mucho más fluida. Los expedientes circulan con mayor fluidez y las consultas son mucho más precisas. Sólo ventajas», afirma el jefe de policía Kris Depovere.