Si bien ya es muy difícil conseguir una PlayStation 5, la situación no va a mejorar en 2022 según Sony. La misma observación en Nintendo, donde Switch estará disponible en cantidades más limitadas que el año pasado. En cuestión, la escasez de semiconductores que no se agota y que, según las previsiones, impactará en el resultado económico de las dos empresas para el presente año.
Demanda mayor que oferta
Se vendieron 11,5 millones de PlayStation 5 y 23 millones de Nintendo Switch durante el año fiscal que terminó el 31 de marzo de 2022. Para la consola de Sony, disponible desde finales de 2020, es difícil sacar conclusiones en términos de ventas. Por el lado de Nintendo, la compañía japonesa ha visto caer un 20% el número de ventas de su consola respecto a 2020. La situación no va a mejorar, los dos gigantes de la industria de los videojuegos están revisando sus estimaciones en cuanto a máquina ventas del año en curso.
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La escasez de semiconductores que dificulta la producción de consolas es la primera causa mencionada. El CEO de Nintendo, Shuntaro Furukawa, lo lamenta y dice que no ve el final de esta escasez por un tiempo. El director financiero de Sony, Hiroki Totoki, hace la misma observación. Desde 2020, la empresa no ha podido satisfacer la demanda de PS5, que es mucho más fuerte que la oferta. La ventaja para Sony es su capacidad de vender todas las consolas producidas explica el Wall Street Journal.
Las dos empresas japonesas también están preocupadas por la situación sanitaria en China, donde los confinamientos, en particular en Shanghái, han repercutido en la producción de chips. Si las condiciones se deterioraran, las previsiones de ventas se revisarían a la baja. Por el momento, Nintendo estima que puede vender 21 millones de Switches al final del año fiscal. Sony está fijando un objetivo de 18 millones de PlayStation 5, más que en 2021.
Nintendo y Sony apuestan por los juegos
A pesar de los problemas de producción, las dos empresas se mantienen en muy buena salud financiera. En PlayStation, la compañía puede contar con ventas de videojuegos de consola que representarán el 29% de la facturación de la industria en 2022 según el último informe de Newzoo. También anunció una inversión de 300 millones de dólares en el desarrollo de los juegos y planea lanzarlos en otros medios, como la PC. Sony pudo contar con sus sucursales dedicadas al cine, la música y los dispositivos electrónicos para mantenerse en 2021 al alcanzar los 9.200 millones de dólares de facturación.
Para Nintendo, la escasez podría debilitar aún más los ingresos de la firma japonesa, que depende casi exclusivamente de los videojuegos. Venderá menos consolas en 2022 pero ya tiene 107 millones de Switches instalados en los hogares. Esta sólida posición debería permitir a Nintendo vender 210 millones de juegos durante este año fiscal según su último informe financiero (pdf). Nintendo planea así alcanzar una facturación de 2.600 millones de dólares. El papá de Mario puede contar con licencias fuertes como Pokémon, la franquicia más lucrativa, que verá llegar un nuevo juego a finales de 2022.