La conmovedora declaración de amor de Billy Joel a Warren Zevon


Como muchos otros músicos, Warren Zevon fue nominado como uno de las docenas de candidatos para un lugar en el Salón de la Fama del Rock and Roll. Esto no es una sorpresa, ya que muchos consideran que el rockero gruñón es uno de los mejores en su campo. Pero casi 20 años después de su muerte en 2003, el honor no se materializó. Quizás a los guardianes del buen gusto rockero en Cleveland no les gustó mucho su enfoque cínico de la vida.

Pero eso podría cambiar, porque Billy Joel ha hecho una campaña masiva a favor de la tardía canonización de Zevon. Incluso escribió una carta al comité de nominaciones.

“Sólo quería abogar por la incorporación de Warren Zevon”, dijo Joel a Los Angeles Times hace un año. “Si alguien lo merece es él. Era un auténtico original y no sé si eso se ha apreciado lo suficiente”.

Billy Joel ha sido miembro del Salón de la Fama desde 1999 y ha escrito cartas similares para Joe Cocker y Cyndi Lauper en el pasado.

Billy Joel: “Warren Zevon no tenía miedo”

¿Pero por qué el corazón de Joel late por Zevon? “El primer minuto que vi a Zevon, me quedé atónito”, recuerda sobre sus actuaciones en los años 1970. “Era como el hermano loco que nunca tuve. No tenía miedo y eso se me quedó grabado. Nunca pensé que recibiera la atención que merecía”.

Joel sospecha que la razón de la falta de respeto es que Zevon era pianista “y todos tendemos a ser agrupados con la idea de que ‘no son verdaderos músicos de rock'”. No cree que sea justo, pero entiende por qué sucede. “El piano es visto como un instrumento mediocre tocado sólo por idiotas”, continuó Joel. “Pero cuando vi a Warren, estaba rompiendo el piano pieza por pieza, lo que me pareció un estilo increíble”.

Un proceso que debe entenderse como metafórico y físico al mismo tiempo. “El piano es en realidad un instrumento de percusión”, continúa Joel. “La mayoría de la gente piensa que es un instrumento de cuerda, pero lo tocas como un tambor. Y Warren realmente cumplió ese papel. Tocaba su piano y lo hacía bien. Incluso sin amplificador, consiguió sacarle el máximo volumen posible”.



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