Koulibaly entre la renovación y las tentaciones catalanas. Nápoles no es una cuestión de dinero

Más de 4 millones netos ofrecidos por la renovación, pero el defensa senegalés quiere entender si el Barcelona está dispuesto a hacer un esfuerzo para decidir si emprende una nueva apuesta en España para conquistar algunos títulos

Abrázate en Koulibaly. Idealmente, imaginamos a los hinchas del Napoli perdiendo uno a uno los referentes de un equipo que no ha ganado mucho pero ha sido querido. El de 91 puntos con Maurizio Sarri y también este último que en primavera había olido brevemente el scudetto. Cada equipo tiene sus ídolos. Fue Lorenzo Insigne, más aún Dries Mertens y ambos se van por una política de empresa que no mira a nadie a la cara en el programa de recortes que impone la crisis económica. Las relaciones se cerraron de manera abrupta, lo que quizás se podría haber manejado mucho mejor en términos de comunicación. Pero así es. De acuerdo en que las banderas ya no existen, pero al mismo tiempo el fútbol sigue siendo pasión y los campeones en el campo qué la alimentan.

CAMPEÓN DE KOULIBALY POR DENTRO Y POR FUERA

Y el defensa senegalés encarna mejor que ningún otro el espíritu napolitano de inclusión y solidaridad. Un campeón por dentro y por fuera que siempre ha unido a las personas con su testimonio. Hasta hace unos días, en respuesta a un mal artículo que le contaba en apuros en la ciudad napolitana en sus inicios, Kalidou respondió con elegancia en una publicación de Instagram: una foto con los napolitanos en el estadio mostrando su rostro, el escrito “Nápoles ciudad antirracista” y de fondo “’O scarrafone” de Pino Daniele que canta “Viva viva’ o Senegal”. Este es el vínculo profundo entre el defensor y su gente. Por eso el hincha pide que él tampoco sea sacrificado en el altar de la austeridad.

¿QUÉ HACE DE LAURENTIIS?

He aquí entonces que incluso a la luz de los lanzamientos y recortes ya realizados, el presidente podría hacer una excepción con Koulibaly. En parte ya lo ha hecho ofreciendo más de 4 millones netos por renovación, cifra que ha decidido no destinar a nuevas contrataciones que alcanzarán un máximo de poco más de 3 millones. Pero la reflexión del jugador sobre la renovación no está ligada a situaciones exclusivamente económicas. Xavi le quiere en el Barcelona y Koulibaly está a la espera de ver si el club está realmente dispuesto a hacer un esfuerzo para ver si toma una nueva apuesta en España para ganar algunos títulos. Pero si los culés no presionaban, quizás se podría retomar el discurso de renovación. Y Koulibaly sigue siendo durante años el capitán con cara de derecha en el Nápoles. Porque incluso el fútbol puede seguir siendo un cuento de hadas.



ttn-es-14