Los jugadores de hockey holandeses se han convertido en campeones del mundo por tercera vez consecutiva. En la Terrassa española, Argentina ganó 3-1 en la final. Es el duodécimo título mundial en total para los Países Bajos.
La Naranja se adelantó a los quince minutos de un corner corto. Tras una débil intervención de la portera argentina, Maria Verschoor remató de cerca.
En el segundo cuarto, la ventaja se amplió con hits de Frédérique Matla y Felice Albers. El 3-1 de Agustina Gorzelany cayó demasiado tarde para que realmente volviera la tensión.
La final de la Copa del Mundo fue una repetición de la final olímpica del año pasado en Tokio. También entonces, Holanda empató el final más largo 3-1.
Seis meses después del éxito olímpico, Alyson Annan fue despedida como seleccionadora nacional tras una diferencia de opinión con la asociación de hockey. Las entrevistas de evaluación con la selección mostraron que los jugadores padecían un clima de trabajo inseguro.
Luego se nombró al asistente Jamilon Mülders como entrenador en jefe. La final del Mundial fue el último partido del alemán como principal responsable, quien de inmediato indicó que solo estaba disponible como seleccionador nacional interino. Es reemplazado por Paul van Ass.
Felice Albers mandó a Holanda 3-0 a puerto seguro.
Holanda ataca tras un comienzo nervioso
Holanda comenzó la final nerviosa e inmediatamente tuvo que sobrevivir a dos corner cortos argentinos. Esto se debió en parte a una amable intervención de Marloes Keetels en la línea.
En el primer córner corto para Holanda, fue golpeado de inmediato. Verschoor tocó el balón desde corta distancia después de que un córner corto de Yibbi Jansen se atascara. La portera argentina Belén Succi cometió un gran error.
Poco después, Matla duplicó la ventaja al golpear fuerte con su revés. Albers puso el favorito después de una buena ruptura en el 3-0, después de lo cual Gorzelany le dio a Argentina algo de esperanza al empujar desde un córner corto.
Holanda ganó esta Copa del Mundo, que se jugó en Amstelveen y España, todos los partidos en el tiempo reglamentario. Tras las victorias en la fase de grupos ante Alemania, Chile e Irlanda, Bélgica (2-1) y Australia (1-0) se clasificaron en cuartos de final y semifinales respectivamente.