Bruna Alexandre causó revuelo en París. El tenista de mesa brasileño sólo tiene un brazo y tiene una gran misión.
En el exterior jugó el equipo alemán con Timo Boll, junto a ellos el equipo francés con el nuevo héroe del tenis de mesa Felix Lebrun. Pero buena parte de la atención en la Arena Sud 4 de París se centró en Bruna Alexandre, la brasileña número 182 del mundo. Lo que la distingue de Boll o Lebrun: Alexandre sólo tiene un brazo.
La joven de 29 años no tuvo posibilidades de ganar una medalla en París, pero aun así mostró una actuación notable. Con el número 182 del mundo, derrotó a la surcoreana Lee Eun Hye, que ocupa el puesto 42 del mundo, en la competición por equipos. Este fue el debut olímpico de Alexandre, pero luego se retiró de la selección brasileña.
Alexandre es un jugador de Para tenis de mesa desde hace mucho tiempo y ya ha ganado varias medallas Paralímpicas: bronce en Río 2016 y plata en Tokio 2021. Pero la ambiciosa zurda aspira a más: no sólo quiere competir en los Juegos Paralímpicos, sino que también quiere ganarle a atletas sin discapacidad.
“Estoy muy feliz de poder representar aquí a todas las personas con discapacidad y demostrar que todo es posible”, dijo durante su participación en los Juegos Olímpicos. Se considera una embajadora de la inclusión en el deporte. Sin embargo, para ella existe una regla especial: a diferencia de otros jugadores, a ella se le permite levantar la pelota con su raqueta al sacar, lo que en realidad es una violación de las reglas.
Alexandre no es el primer atleta que compite tanto en los Juegos Olímpicos como en los Paralímpicos. Otros ya lo han hecho, como la campeona olímpica de disco Ilke Wyludda, que empezó una segunda carrera tras una amputación de la pierna.
La doble salida en los Juegos Olímpicos y Paralímpicos del mismo año es mucho más rara. La primera en lograrlo fue la polaca Natalia Partyka, también en tenis de mesa, y lo hizo en cuatro ocasiones, de 2008 a 2021. Otras cuatro mujeres lograron semejante honor “paralímpico” y sólo un hombre lo logró: el velocista Óscar, que luego cayó. Un largo camino Pistorius.
“Partyka me inspiró, ella inició este capítulo de la historia del tenis de mesa”, dice Alexandre. Ella misma deja claro que no se siente limitada por su discapacidad.
La brasileña perdió su brazo cuando era bebé debido a una trombosis. También es una de las favoritas para los Juegos Paralímpicos de París, que comienzan el 28 de agosto. No ganará una medalla olímpica, pero en su opinión su participación en los Juegos Olímpicos ya ha demostrado que la inclusión en el deporte es posible y debe fomentarse. “Espero que algún día sea normal que una persona con discapacidad juegue contra alguien con dos brazos”, afirmó Alexandre.