Como parte de la Ley Europea de Chips, un plan de 43 000 millones de euros para duplicar la cuota de mercado de semiconductores de Europa, la UE va a ayudar mucho a Intel. De hecho, el fabricante de componentes electrónicos debería instalarse pronto en Europa y cobrar la suma de 6.800 millones de euros, en diversas formas, para construir su fábrica en Alemania.
Intel establecerá su fábrica de chips en Magdeburg, Alemania, para 2027
El proyecto “Silicon Junction” es el que lidera Intel para instalarse definitivamente en Europa. Esto comienza irremediablemente con la construcción de una planta de fabricación de componentes electrónicos que estará ubicada en Magdeburg, en el Land de Sajonia-Anhalt, al suroeste de Berlín. Este gran proyecto debe comenzar en la primera mitad de 2023 para una apertura efectiva en 2027.
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Así debería ser la fábrica de Intel en Magdeburg. Imagen: Intel.
La elección de la ciudad de Magdeburgo se hizo por varios motivos, tal y como indica Mikael Moreau, portavoz de Intel: «Magdeburg reunió todos los puntos clave que Intel estaba buscando «. » Intel quería un área muy grande, alrededor de 400 hectáreas. También quería asegurar importantes necesidades de agua y electricidad, renovables a ser posible. “, especificó Max Milbredt, el responsable del sector de los chips electrónicos de Germany Trade and Invest, el equivalente alemán de Business France, que acompañó el establecimiento de Intel en Alemania.
La capacidad de respuesta de los servicios administrativos de Magdeburg es un punto que la firma americana no ha descuidado, ya que es el lugar central de la ciudad en Europa, lo que garantiza una buena conexión con otras ciudades europeas a través del transporte. Pero uno de los puntos que más ha inclinado la balanza es el aspecto económico. Al estar ubicada en la antigua RDA, Magdeburg está autorizada a pagar mayores subsidios a los inversores que en los Lands del oeste y sur del país, que están mucho más industrializados.
La Unión Europea pagará 6.800 millones de euros en total a Intel
Eso sí, la construcción de esta fábrica es esperada con impaciencia en esta región ya que debería suponer la creación de 7.000 puestos de trabajo temporales (para la construcción de la fábrica) y 3.000 puestos fijos (vinculados al buen funcionamiento de la fábrica). Además, la llegada de esta fábrica también generará puestos de trabajo con proveedores de servicios y socios locales de Intel.
Para ayudar a Intel a construir su fábrica, la Unión Europea pagará 6.800 millones de euros al grupo, incluidos 2.720 millones este año. En total, estos distintos pagos deberían cubrir cerca del 40% del coste total de la construcción, que ascendería a 17.000 millones de euros. Dentro de esta nueva fábrica, Intel fabricará chips utilizando sus procesos más avanzados. La firma también producirá chips para marcas independientes a través de su programa Intel Foundry Services.