Se dice que hace cuatro años, dos estudiantes de policía de Berlín corearon “Sieg Heil” en un evento deportivo. Primero fueron condenados. Luego absuelto. Después de que el Tribunal de Apelación anulara las absoluciones, ahora están de vuelta ante el Tribunal Regional.
Ellos niegan con vehemencia las acusaciones. Ambos han completado ahora su formación con la policía y son agentes del orden.
El incidente: 27 de abril de 2018, Mercedes-Benz Arena (Friedrichshain), Alba Berlin juega al baloncesto. Se dice que las palabras “Sieg Heil” se pronunciaron en las gradas de los espectadores “claramente perceptibles para los transeúntes”. Según la acusación del fiscal de Berlín, los estudiantes de policía en ese momento sabían que ese era el saludo prohibido del NSDAP.
El tribunal de distrito: El 16 de mayo de 2019 fue condenado en virtud del párrafo 86a (uso de signos de organizaciones inconstitucionales y terroristas, multa de hasta tres años de prisión). Ambos son declarados culpables. Cada uno multado con 40 tasas diarias. Uno debe pagar 2400 euros, el otro 1200 euros. Ambos están apelando la condena.
El tribunal regional: 23 de octubre de 2020. Tras otra audiencia, el veredicto es: absolución. La oficina del fiscal de Berlín no está de acuerdo con esto y está apelando.
El Tribunal Superior: 31 de mayo de 2021. Las absoluciones son revocadas por sentencia y remitidas a otra sala penal del tribunal de distrito para una nueva audiencia y decisión.
El tribunal de distrito, segundo intento: “Señores: Todo de vuelta al principio”, dice el juez. Eric W. (31) y Tobias B. (29) han estado enfrentando las mismas acusaciones durante cuatro años.
“No tengo vistas reales”, dice Eric W. “Si hubiera escuchado esos gritos en el pasillo, definitivamente los habría detenido. Esa fue la primera vez que estuve con Alba, y desde entonces nunca más”.
Tobias B. también protesta por su inocencia: “Hubo cánticos de los aficionados y al final hubo gritos de victoria porque iba liderando Alba. Yo participé y era ruidoso. Pero solo grité ‘victoria’, nada más”.
Sentencia de 3 de marzo. Un ex coacusado había aceptado la condena del tribunal de distrito y pagado la multa impuesta.