Gobierno federal pone plan de alcohol sobre la mesa: ‘Como siempre fuertemente influenciado por el lobby del alcohol’

Un amplio plan sobre el alcohol ha estado sobre la mesa de los sucesivos gobiernos belgas durante años. En 2017, la entonces Ministra de Salud Maggie De Block (Open Vld) todavía podía contar con las críticas, incluso del socio de coalición CD&V, cuando su plan de alcohol ampliamente anunciado resultó contener solo unas pocas medidas pequeñas.

Ahora el actual Gobierno ha salido con una posición conjunta tras el Consejo de Ministros. “Con esta posición, el gobierno federal ya lo tiene claro: queremos hacer todo lo posible para limitar aún más el uso excesivo y, por lo tanto, nocivo del alcohol, tanto desde el punto de vista de la salud pública como de la seguridad vial”, dice el ministro de Salud, Frank Vandenbroucke. (Voruit).

El gobierno federal quiere principalmente controlar el consumo de alcohol entre los jóvenes. “No porque beban más, sino porque experimentan las consecuencias más dañinas”, explica el gabinete de Vandenbroucke. Por ejemplo, el gobierno está pidiendo que se prohíba la publicidad de bebidas alcohólicas en los medios dirigidos a los jóvenes. Esto no solo se refiere a la prohibición en la televisión, sino también en el cine, en las redes sociales como YouTube y en periódicos y revistas con un público objetivo principalmente menor de edad.

Además, se está desarrollando un programa de atención a jóvenes con problema de alcohol. Se ofrecerá este programa a los jóvenes que terminen en el hospital por intoxicación alcohólica o por un accidente bajo la influencia del alcohol.

Limite de edad

También habría medidas para la venta de alcohol en sí. El gobierno quiere elevar el límite de edad para cervezas y vinos fortificados, como la cerveza con tequila de Desperados, a 18 años. Entre las 10 pm y las 7 am, las tiendas a lo largo de la carretera, por ejemplo en las estaciones de servicio, ya no podrán vender ningún tipo de alcohol, “para limitar el número de muertes en la carretera”. Ya existe una prohibición total en varios otros países, como los Países Bajos.

Las máquinas expendedoras y las tiendas en los hospitales ya no podrán vender bebidas alcohólicas según la propuesta. “Eso conduce demasiado a las compras impulsivas”, dice el gabinete. Es notable que en los hospitales solo se trataría de bebidas frías. Las tiendas de los hospitales aún podrán vender bebidas a temperatura ambiente. También está permitido beber una cerveza o una copa de vino en la cafetería.

“Hemos dado consejos claros al gobierno varias veces, pero solo los encontramos en una forma mucho más débil”, responde Katleen Peleman, directora del Centro Flamenco de Expertos en Alcohol y otras Drogas (VAD). “Extraño la imagen estructural. Apenas tocan los puntos más importantes, a saber, publicidad, disponibilidad y precio”.

Según la profesora de psiquiatría Frieda Matthys (VUB), todas las propuestas tendrán poco o ningún efecto sobre el consumo de alcohol de las personas: “El gobierno se enfoca mucho en los jóvenes y en el consumo ‘nocivo’ de alcohol. Pero cualquier forma de consumo de alcohol puede tener graves consecuencias para todos. Estas propuestas, como siempre, han estado fuertemente influenciadas por el lobby del alcohol, que es supuestamente constructivo pero solo propone medidas que no tienen ningún efecto en sus ventas”.

Ambos expertos coinciden: solo una prohibición total de la publicidad, un límite de edad de 18 años para todas las bebidas alcohólicas y una prohibición permanente de la venta de alcohol en la carretera y en los hospitales pueden tener un impacto significativo.

Las propuestas del gobierno federal aún deben finalizarse durante una conferencia interministerial con los gobiernos estatales. Se realizaría en diciembre.



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