Giorgia Meloni de Italia le dijo al presidente del país que su coalición de derecha estaba unida y lista para formar un gobierno con ella como primera ministra, después de días de rencor dentro de la alianza por la asignación de puestos en el gabinete.
Meloni y sus aliados electorales, Matteo Salvini, líder de la Liga, y Silvio Berlusconi de Forza Italia, se reunieron el viernes por la mañana con el presidente italiano Sergio Mattarella para una consulta formal, luego de su decisiva victoria en las elecciones anticipadas del mes pasado.
“Estamos listos para darle un gobierno a esta nación lo más rápido posible”, dijo Meloni después, citando los “problemas urgentes” que enfrenta Italia.
Meloni, líder del partido Hermanos de Italia, dijo que su coalición había «dado una indicación unánime de proponerme como la persona a cargo de formar el gobierno», dejándola preparada para convertirse en la primera mujer primera ministra de Italia desde que el país se unificó en 1871.
La reunión con Mattarella fue inusualmente breve, duró solo 11 minutos, informaron las agencias de noticias italianas. La oficina de Mattarella dijo que Meloni se reuniría nuevamente con el presidente el viernes por la tarde, cuando se espera que sea invitada formalmente a formar gobierno.
La presentación de la coalición de un frente unido sigue a días de drama, que los analistas dicen que fue provocado por la incapacidad del ex primer ministro Berlusconi para asegurar posiciones clave para sus leales.
Cuando el nuevo parlamento se reunió por primera vez la semana pasada, se vio a Berlusconi sosteniendo una nota garabateada que describía a Meloni como «obstinada, dominante, arrogante y ofensiva», y agregaba que era «alguien con quien no te puedes llevar bien».
Sin embargo, incluso después de que se imprimiera una foto de la nota en un periódico importante, Meloni pareció imperturbable y les dijo a los periodistas que la nota «olvidó un punto: no puedo ser chantajeado».
Meloni luego tuvo que emitir una declaración afirmando que el apoyo a Europa y la OTAN sería una «piedra angular» de su gobierno, luego de la filtración de grabaciones de audio de Berlusconi diciéndoles a los legisladores del partido que el presidente Volodymyr Zelenskyy era el culpable de la invasión rusa de Ucrania, y afirmando su amistad con Vladimir Putin.
Declaró que cualquiera que no esté de acuerdo con su orientación pro-Europa, pro-OTAN “no puede ser parte del gobierno, incluso si eso significa no hacer el gobierno”.
Ni Berlusconi ni Salvini hablaron tras la reunión con Mattarella. En publicaciones anteriores en las redes sociales, Berlusconi escribió que la derecha formaría un «gobierno cohesionado», mientras que Salvini dijo que «no podía esperar a que las palabras se convirtieran en hechos».
Mattarella fue reinstalado para un segundo mandato de siete años como presidente en enero. El jefe de estado de Italia juega un papel importante en la formación de gobiernos, especialmente en tiempos de estancamiento político, y tiene el poder de vetar los nombramientos de ministros.
Información adicional de Giuliana Ricozzi en Roma