La leyenda del ciclismo se embarcó en la etapa más difícil: la que vio la libertad en la meta
No lo dudó: esta es la frase que le entrega a la historia, sin distinción de triunfos, de celebridad, de un tablón de anuncios que contiene, hacinados entre las estanterías de una era legendaria, tres Vueltas a Italia, dos Vueltas a Francia. , tres Vueltas a Lombardía y cuatro Milán-San Remo. Este es el polvo que se asienta sobre el cajón de su conciencia que, si de él hubiera dependido, habría permanecido cerrado sin buscar el mérito que le seguimos dando.