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Imran Hussain se ha convertido en el primer líder laborista en dimitir por la cuestión del enfoque de Sir Keir Starmer ante la situación en Gaza, aumentando la presión sobre el líder de la oposición británica.
Hussain, que era ministro en la sombra para los derechos laborales, advirtió sobre una creciente “catástrofe humanitaria” y dijo que quería ser libre “para poder abogar firmemente por un alto el fuego, como lo pidió el Secretario General de la ONU” en la Franja de Gaza.
Starmer ha sido criticado por varios ministros en la sombra, dirigentes de partidos y alcaldes regionales por su negativa a pedir un alto el fuego entre Hamás e Israel.
El líder laborista ha argumentado que un alto el fuego dejaría a Hamás con la capacidad militar para repetir sus ataques de hace un mes contra civiles israelíes. En cambio, ha respaldado los llamados a una “pausa humanitaria” temporal en línea con el Reino Unido, Estados Unidos, los gobiernos y la Unión Europea.
En su carta de renuncia, Hussain dijo que creía que sólo un alto el fuego podría “poner fin al derramamiento de sangre” y que su posición sobre Gaza “difiere sustancialmente” de la del líder de su partido, lo que hace imposible continuar en un puesto ministerial en la sombra.
También dijo que había estado «profundamente preocupado» por los comentarios de Starmer en la radio LBC que parecían respaldar que el gobierno israelí cortara la electricidad y el agua en el enclave.
Hussain fue elegido en Bradford East en 2015, recuperando el escaño de los demócratas liberales.
En medio de crecientes tensiones dentro del Partido Laborista y múltiples renuncias de concejales locales musulmanes, Starmer había esperado que al permitir que los líderes adoptaran una posición diferente sobre el tema podría evitar las renuncias de los ministros en la sombra. La salida de Hussain generará temores en el equipo del líder sobre la posibilidad de que más ministros en la sombra abandonen sus puestos delanteros.
Entre los parlamentarios que han expresado su preocupación por su posición se encuentra Shabana Mahmood, secretaria de justicia en la sombra, quien escribió a sus electores diciendo que los comentarios de Starmer en la radio habían causado una «profunda angustia».
Dieciocho diputados laboristas han pedido ahora un alto el fuego, aunque ninguno del gabinete en la sombra.