Mike D. fue sentenciado a 10 años de prisión el 6 de septiembre, pero claramente no tenía intención de cumplirlos. El día de su sentencia, el hombre, que estaba bajo vigilancia electrónica, se quitó la tobillera y huyó.
La detección del violador en serie se convirtió inmediatamente en una prioridad para la fiscalía de Lieja. El equipo FAST de la Policía Judicial Federal fue llamado y buscó rastros del condenado tanto en Bélgica como en el extranjero.
Gracias a la investigación continua, los investigadores del equipo FAST pudieron localizar al hombre al cabo de unos días. Desde entonces han estado pisándole los talones. Mike D. fue finalmente detenido discretamente y sin problemas el pasado jueves en Jupille-Sur-Meuse, informó la Policía Federal en un comunicado de prensa. Tras su arresto, fue llevado a prisión, donde ahora cumple su condena.
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