Abramovich, a quien se considera un confidente cercano del presidente ruso, Vladimir Putin, ha invertido cientos de millones de euros en el Chelsea.
En una breve declaración en el sitio web de Chelsea, en la que Abramovich dijo que transferiría la «administración y el cuidado» de Chelsea a la fundación, no dijo nada sobre la guerra en Ucrania.
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«Durante mi período de casi 20 años como propietario del Chelsea, siempre me he visto como el guardián del club, cuyo trabajo es asegurarse de que tengamos el éxito que tenemos hoy», dijo Abramovich. “Estamos construyendo el futuro mientras también desempeñamos un papel positivo en nuestras comunidades. Siempre he tomado decisiones en el mejor interés del club. Es por eso que hoy doy a los fideicomisarios de la fundación de Chelsea la administración y el cuidado de Chelsea. Creo que actualmente están en la mejor posición para representar los intereses del club, los jugadores, el personal y los aficionados”.