Este es un momento crítico para Europa “y esperamos que aquellos valores fundacionales que nos unieron nos mantengan unidos”. Así lo afirmó el ex primer ministro Mario Draghi en la presentación del libro de Aldo Cazzullo “Cuando éramos dueños del mundo”. Draghi no ocultó su “preocupación” al explicar que hoy “el modelo de crecimiento se ha disuelto y necesitamos reinventar una manera de crecer pero para ello necesitamos convertirnos en un Estado”. El mercado europeo es demasiado pequeño, hay muchos mercados y por eso las pequeñas empresas que nacen en Europa en cuanto crecen o venden o se van a Estados Unidos”.
Draghi: empezando a pensar en ser italoeuropeo
No solo. Para Draghi, lo que se hizo «con la ampliación de la Unión Europea sin cambiar las reglas que funcionaban cuando éramos doce miembros fue un error colosal». Ahora lo más importante «es entender cómo poner en marcha fondos europeos que financien la defensa y la lucha contra el cambio climático. Entonces necesitamos una política exterior coordinada porque los Ministros de Asuntos Exteriores se ven pero no pueden ponerse de acuerdo. Necesitamos pensar en una mayor integración política, en un verdadero Parlamento Europeo, tenemos que empezar a pensar que somos italianos y europeos”. El ex primer ministro observó, sin embargo, que “hoy la unión fiscal es menos importante que hace diez años porque con la moneda única los países se han vuelto mucho más similares” desde el punto de vista industrial. «Y luego – concluyó con una referencia irónica al ‘cueste lo que cueste’ – a partir de una fecha determinada el BCE actuó como estabilizador de los mercados…».
Europa tendrá que hacer más por Oriente Medio que enviar dinero a la ONU
En el futuro escenario de Oriente Medio “Europa tendrá que estar presente no sólo financiando a la ONU desde lejos, sino hacer algo más de lo que ha hecho hasta ahora”, por ejemplo en Ucrania. Para Draghi “no basta con invertir mucho dinero: Europa tendrá necesariamente un papel, pero evidentemente no será militar, dado que somos débiles y poco creíbles, mientras que habrá una gran demanda de una presencia humanitaria”.
«No creo en conspiraciones universales sobre la Expo 2030»
En cuanto a la derrota de Roma en el encargo de la Expo 2030, el ex primer ministro admitió que no conocía bien toda la historia. «No sé por qué sólo obtuvimos 17 votos, pero no creo en conspiraciones universales», comentó, «también porque Italia ya tuvo una Expo en 2015 en Milán».