Por un lado, está el compromiso asumido por Italia de aumentar el gasto en defensa hasta el umbral del 2% del PIB, objetivo aún por alcanzar. Por otro lado, hay una Europa que, en materia de cuentas públicas, avanza hacia un esquema de reforma del Pacto de Estabilidad que no nos permite de forma realista destinar recursos a tal fin. Desde este punto de vista, es necesario que exista la posibilidad de separar el gasto en defensa de las limitaciones presupuestarias. Este es un resumen del mensaje lanzado por el Ministro de Defensa, Guido Crosetto, durante la audiencia sobre las líneas programáticas de las comisiones mixtas de Defensa de la Cámara y de Relaciones Exteriores y Defensa del Senado.
«El objetivo del 2% es difícil de alcanzar»
El ministro recordó que «la decisión de destinar el 2% del PIB a gastos de defensa no la tomé yo, data de 2014 y fue reiterada por todos los gobiernos que siguieron. Yo -remarcó- fui el único que dijo en la reunión de la OTAN de ayer (el ministro habló en Bruselas en la reunión del Consejo Atlántico en formato de ministro de defensa, ndr) que el 2% es un objetivo difícil de alcanzar, dadas las condiciones financieras. Estamos en el 1,38%, de ahí la propuesta de separar el gasto en defensa de las limitaciones presupuestarias. De lo contrario -subrayó Crosetto- seremos los «Pierini» de la OTAN, los únicos en no alcanzar el objetivo del 2% cuando otros ya hablan del 3% o del 4%».
Ucrania: dispositivos de protección NBC de Italia
En cuanto al apoyo a Ucrania, Crosetto recordó que «siempre se habla de armas, de tanques pero también han llegado pedidos de cosas mucho más preocupantes, como equipos para la defensa contra ataques nucleares, bacteriológicos y químicos, que hacen menos noticia algunos tanques, pero que probablemente daremos como Italia». Las fuerzas armadas disponen de ropa, mascarillas y kits de protección contra agentes nucleares, bacteriológicos o químicos.
«Me preocupa el frente sur: crece el terrorismo»
«La OTAN -subrayó el ministro de Defensa italiano- no es belicista: hay una percepción de inseguridad en el mundo, el escenario internacional es problemático. No solo por Ucrania, me preocupa el frente sur donde crece el terrorismo: el tema principal en los próximos años será África”.
«Cambiando el enfoque de las misiones internacionales»
Según Crosetto, es necesario cambiar el enfoque de las misiones internacionales. “Creo que el enfoque que hemos tenido hasta ahora de las misiones internacionales es erróneo -explicó-. Tenemos que preguntarnos el resultado de una misión. ¿Hemos aumentado el PIB de ese país? ¿La seguridad? ¿Cuál es el propósito? Al mismo tiempo que el aspecto militar debemos involucrar la cooperación para intervenciones en educación, salud, crecimiento económico, creación de riqueza en ese lugar. Me gustaría para el próximo decreto de misión -continuó el ministro- un enfoque diferente, que mida el resultado. Asignamos 1,3-1,5 mil millones de euros, tenemos que medir cuánto ha servido la misión. Es un cambio de 360 grados».