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Las historias que importan sobre el dinero y la política en la carrera por la Casa Blanca
El gobernador de Carolina del Norte, Roy Cooper, retiró su nombre de la consideración para ser compañero de fórmula de Kamala Harris, reduciendo así el campo de demócratas prominentes que compiten por ser su elección para vicepresidente.
Cooper dijo en una breve declaración publicada en las redes sociales el lunes que si bien apoyaba “firmemente” la campaña de Harris para presidente, “no era el momento adecuado” para que él estuviera en la candidatura demócrata a la Casa Blanca.
“Sé que ella va a ganar y me sentí honrado de que me tuvieran en cuenta para este puesto”, dijo Cooper. “Simplemente, no era el momento adecuado para que Carolina del Norte y yo estuviéramos en una candidatura nacional”.
Cooper no brindó más detalles sobre el momento ni el motivo de su decisión. Los representantes de Cooper y de la campaña de Harris no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios.
Harris, la actual vicepresidenta que la semana pasada se convirtió en la presunta candidata demócrata a la presidencia solo un día después de que Joe Biden suspendiera su intento de reelección, está bajo presión para seleccionar un compañero de fórmula antes de una lista virtual de delegados del partido la próxima semana y la Convención Nacional Demócrata a mediados de agosto, donde se espera que acepte oficialmente la nominación de su partido para presidente.
Según se informa, la campaña de Harris está investigando a varios candidatos, concretamente a varios gobernadores demócratas (incluidos Josh Shapiro de Pensilvania, Andy Beshear de Kentucky y Tim Walz de Minnesota), así como al senador estadounidense Mark Kelly de Arizona y Pete Buttigieg, el secretario de Transporte de Estados Unidos.
Varios de los posibles candidatos a vicepresidente han salido a la campaña para apoyar a Harris en los últimos días. El lunes, Shapiro y la gobernadora de Michigan, Gretchen Whitmer, reunieron a más de 1.000 partidarios en los suburbios de Filadelfia, Pensilvania, para generar entusiasmo por la candidatura de Harris para derrotar a Donald Trump.
Hasta el lunes, Cooper, quien se ha desempeñado como gobernador de Carolina del Norte desde 2007, había sido considerado por muchos como uno de los favoritos para ser el compañero de fórmula de Harris.
Al igual que Harris, Cooper se desempeñó anteriormente como fiscal general del estado. También hizo campaña con Harris varias veces en los últimos meses en Carolina del Norte, que se ha convertido en un estado clave en la carrera por la Casa Blanca.
Cooper había sido durante mucho tiempo el favorito de los operadores del partido demócrata y de los donantes influyentes por su capacidad para ganarse a los votantes moderados y centristas en un estado clave.
Fue elegido gobernador de Carolina del Norte en 2016 y reelegido en 2020, incluso cuando Trump ganó en el estado contra Hillary Clinton y Biden. Cooper superó a Biden por seis puntos en la boleta electoral de 2020.
Pero Cooper, cuyo mandato está limitado y no puede presentarse a la reelección como gobernador de Carolina del Norte, también ha sido visto ampliamente como un posible futuro candidato al Senado de Estados Unidos en su estado natal.
Cooper no mencionó al Senado en su declaración.