En partes de las provincias orientales de Ituri y Kivu del Norte, los conflictos se han intensificado en los últimos 12 meses. En Kivu del Norte, otras 600.000 personas han sido desplazadas desde marzo del año pasado.
«Las necesidades son enormes», dijo el miércoles Bruno Lemarquis, coordinador humanitario para el Congo. Señala que la crisis humanitaria en el Congo es una de las más antiguas, grandes y complejas del mundo. “La ayuda humanitaria no es la solución a una crisis humanitaria, pero sigue siendo fundamental para atender las necesidades de millones de familias afectadas”, dijo Lemarquis.
Congo tiene alrededor de 100 millones de habitantes, y 5,7 millones de ellos son refugiados en el Congo.
De los 1880 millones de dólares necesarios en 2022, poco menos de la mitad se financió. Como resultado, millones de personas quedaron a la intemperie, lamenta este miércoles la agencia de la ONU: solo se ayudó a 5,5 millones de los 8,8 millones que necesitaban ayuda.