«Hemos evacuado a algunas personas, ahora lo estamos comprobando. Estamos en contacto con la prefectura. El río explotó en estos minutos». Lo dice el alcalde de Modigliana (Forlì Cesena), Jader Dardi. El pequeño municipio ya había sido devastado por innumerables deslizamientos de tierra en mayo de 2023, cuando las crecidas de los ríos azotaron Romaña.
«Evitar todos los viajes». Emilia Romagna se prepara para otra jornada de mal tiempo, con toda la región conteniendo la respiración ante las despiadadas previsiones meteorológicas, salpicadas de lluvias, tormentas y niveles de agua que duplican los registrados en todo un mes. No todas las escuelas permanecerán cerradas en la mayoría de las provincias, mientras la gobernadora en funciones, Irene Priolo, invita a las empresas a permitir en la medida de lo posible el trabajo inteligente. El ministro Musumeci firma el estado de movilización para permitir una intervención más amplia de la Protección Civil nacional en la zona, donde llegan columnas móviles de otras regiones dispuestas a intervenir en caso de necesidad.
Lo preocupante, sin embargo, no es sólo la situación en Emilia Romagna, sino también la de Las Marcas, donde los distintos municipios -incluido el de Ancona- han ordenado el cierre de las escuelas, ante las inundaciones y los deslizamientos de tierra registrados a lo largo del día. . Apulia, sin embargo, lamenta la muerte de un bombero, que falleció tras intervenir para socorrer a unos automovilistas sorprendidos por una bomba de agua en la zona de Foggia. Por lo tanto, el ciclón Boris no da señales de amainar y, por el contrario, se prepara para azotar de nuevo durante las próximas 48 horas con tormentas eléctricas, lluvias y vientos que afectarán especialmente al Alto Adriático y al sur del mar Tirreno.
El mapa de perturbaciones está coloreado de rojo y violeta en Emilia Romagna, donde se esperan hasta 110 milímetros de lluvia. Ya el miércoles 18 de septiembre la alerta, inicialmente naranja, se elevó a roja, color que se mantendrá hasta la medianoche del jueves 19 de septiembre. Las continuas lluvias, según el boletín de Protección Civil, podrían provocar deslizamientos de tierra, desbordamientos y escorrentías. Por este motivo, las escuelas permanecerán cerradas en las cuatro provincias afectadas: Bolonia, Forlì Cesena, Rímini y Rávena. La universidad, sin embargo, seguirá impartiendo clases exclusivamente en línea.