Al filo de la medianoche, Strada dei Parchi (SdP) retomó oficialmente la gestión de las autopistas A24 y A25, después de aproximadamente 18 meses de gestión provisional por parte de Anas. Como se sabe, con el Decreto de Anticipos -disposición aprobada por el Parlamento en los últimos días- se inició un largo conflicto con el Estado, iniciado por el concesionario de la Grupo Toto tras la disposición de revocación injusta de julio de 2022. Expropiación de la concesión de la autopista, una de las pocas obtenidas mediante concurso público, deseada por el Gobierno de la época sobre la base de hipótesis que resultaron completamente infundadas.
Entre ellos, los informes y valoraciones ministeriales incompletos que el actual Gobierno ha considerado incorrectos, sancionados por el Parlamento sin oposición, y las investigaciones iniciadas por algunas Fiscalías por presuntos fallos en el mantenimiento de las infraestructuras de las autopistas. Acusaciones radicalmente desmentidas por dos sentencias claras de los tribunales de L’Aquila y Teramo, que absolvieron totalmente a los dirigentes del SdP «porque el hecho no existe».
Debido a este hecho sin precedentes, en el último año y medio todo el Grupo Toto se ha enfrentado a una situación de gestión muy complicada, nunca vista en sus más de 60 años de historia. En este contexto, SdP se vio efectivamente obligada a recurrir al procedimiento de convenio de acreedores, fase que, gracias también a la reintegración en la concesión, se resolvió positivamente.