Los empleadores suelen ser reacios a contratar a desempleados de larga duración porque temen que pierdan su actitud laboral. Esa vacilación debería desaparecer con un descuento en las cotizaciones a la seguridad social. El descuento es una extensión de la prima RSZ existente. A diferencia de la prima, se aplicará a todos los desempleados de larga duración y no solo a los que buscan activamente trabajo.
Los interlocutores sociales y el gobierno ven un VDAB que se acerca más a los solicitantes de empleo como una parte crucial de la solución. Consideran que el hecho de que el mediador laboral solo haya ayudado a seis de cada diez demandantes de empleo a encontrar trabajo después de un año en tiempos de escasez es deficiente.
Es por eso que el VDAB debe evaluar después de una semana si los nuevos solicitantes de empleo pueden encontrar un trabajo por sí mismos. Si este no es el caso, una primera reunión de mediación debe tener lugar después de dos semanas. Hoy eso puede tomar hasta seis semanas.
El gobierno aún tiene que definir las modalidades, como el monto del descuento RSZ. Tiene 90 millones de euros para hacer frente a la escasez en el mercado laboral. Los interlocutores sociales deben tener el acuerdo aprobado por sus partidarios.