Casi se podría decir que es una variante “lenta” de la visita al museo. Las fórmulas de suscripción representan una estrategia para fortalecer la conexión de las personas con el territorio y es una tendencia en constante crecimiento. Ya no son solo unas horas en las habitaciones, una visita a la librería y algunos recuerdos para llevarte. Los programas de membresía, ahora ampliamente difundidos por toda Italia, fidelizan a los visitantes con el tiempo contribuyendo al diálogo entre los museos y las comunidades locales.
Según el Convenio de Faro, tratado multilateral del Consejo de Europa, los Estados están llamados a promover un proceso participativo de valorización del patrimonio cultural basado en la sinergia entre instituciones públicas, ciudadanos privados y asociaciones. En este sentido, las suscripciones a los museos tienden a fomentar una frecuencia opuesta al modelo de “atropello y fuga” (que conlleva muchas desventajas para el sistema en su conjunto) también mediante la inclusión de recursos educativos, programas educativos y eventos especiales en la oferta.
A nivel internacional, los programas de membresía han experimentado un aumento en los últimos años. En Estados Unidos, los museos ofrecen soluciones diversas y personalizadas, con beneficios como acceso temprano a exposiciones, invitaciones a eventos exclusivos, descuentos en tiendas y cafeterías y ofertas especiales para familias. El MoMA, por ejemplo, incluye acceso gratuito e ilimitado al museo, invitaciones a vistas previas de exposiciones y descuentos en actividades educativas. En Europa muchas ciudades han implementado tarjetas que permiten el acceso a múltiples atractivos culturales.
Es el caso del Louvre, el Museo Británico y el Prado, que cuentan con entradas ilimitadas, eventos y descuentos exclusivos, además de contenidos digitales e iniciativas educativas exclusivas. Incluso en lo que respecta a Italia, los datos sobre las suscripciones de los museos estatales muestran un interés floreciente. Entre 2022 y 2023 se produjo un boom, con más del +33%, y un paso en números reales de 22.038 a 29.411 suscripciones. La tendencia positiva se ve confirmada por datos parciales del año en curso.
Hace casi un año y medio que se lanzó la aplicación “Museos italianos” (junto con la plataforma web asociada a ella), que con el paso de los meses ha llegado a cubrir una cuota de más de 400 institutos estatales con cursos de conocimiento y descubrimiento. del patrimonio histórico-artístico, información siempre actualizada y oficial y (sobre todo) la posibilidad de adquirir las entradas online. «La integración de las suscripciones a museos en la aplicación “Museos italianos” representa un paso importante para hacer más accesible e interactivo el patrimonio cultural de todo el sistema de museos nacionales», explica el director de la dirección general de MiC Museums, Roberto Vannata. La introducción de la herramienta ha tenido una acogida favorable: por ejemplo, el Palacio Real de Nápoles lanzó su suscripción a partir del 1 de junio de 2024, coincidiendo con la transición a la gestión de entradas a través de los “Museos italianos”. «Y no se puede descartar que en el futuro exista una suscripción a los “Museos italianos” que permita el uso de todos los lugares culturales presentes en la aplicación», añade Vannata.