Jenneke Ensink, del grupo de acción Stop Wastewater Schoonebeek, creía que el municipio debería presionar a La Haya para que se realicen más investigaciones, como por ejemplo sobre suelos. Según ella, los informes de TNO y SODM dan todas las razones para ello. “Los temblores van en aumento, pero debido a la superficie arenosa no sería tan grave”, repitió una de las conclusiones. Pero no se mencionan las turberas de los alrededores.
Ensink: “SODM y TNO creen que la inyección de aguas residuales debería detenerse en caso de un terremoto de 3 grados en la escala de Richter. Pero creemos que 2 sería mejor”.
Había más preocupaciones sobre el suelo. Como por ejemplo la desecación del suelo de turba y las posibles consecuencias del hundimiento del terreno. Bart van Zon de Nueva Amsterdam advirtió sobre esto al municipio (e indirectamente a Schoonebeek). Especialmente si existe riesgo de más terremotos. En su pueblo, varios residentes sufren daños en sus casas debido al hundimiento.
Y eso, según él, es significativo. “Algunas casas ya no pueden soportar nada. Un terremoto y al menos 20 casas quedan destruidas. Estamos realmente al límite. El municipio tiene aquí una tarea: proteger a sus ciudadanos”.
No todos fueron negativos. Naoberschap Oliedorp (NOD), un grupo de residentes que se pronuncian a favor de reiniciar la extracción de petróleo, ve principalmente el lado positivo. Según Margriet Weerman del NOD, a través de la llamada Mesa de Ayuda se mantiene una buena consulta entre las partes implicadas y los residentes.
Según ella, han recibido muchas sugerencias sobre cómo gastar el dinero asignado a la región. Esto debería beneficiar principalmente a la transición energética (verde), los impulsos económicos, el bienestar y la innovación social.
Según el líder del proyecto NAM, la seguridad es lo primero. “Como WC Duck, no digamos nada al respecto. Pero si no se hiciera bien, no obtendríamos los ingresos que buscamos”. La extracción de petróleo también beneficia a Schoonebeek, destacó. “Se habla de empleo, compras locales e impuestos a los gobiernos locales”.
En última instancia, se realizarán en la zona entre 35 y 40 millones de euros en inversiones y aportaciones, según el responsable del proyecto. Según él, NAM mira hacia el futuro e invierte en iniciativas sostenibles. Menciona, entre otras cosas, la construcción de una fábrica de hidrógeno en el antiguo emplazamiento de GZI y la construcción del parque eólico y solar de Pottendijk, cerca de Nieuw-Weerdinge.
Mañana se discutirá en una reunión del comité la posición que aún debe adoptar el municipio de Emmen sobre la inyección de agua. El Ministerio de Asuntos Económicos tiene esto en cuenta en el proceso de toma de decisiones sobre los planes del MNOAL.