Atalanta que pasa? Tercera derrota consecutiva, Verona también va a Bérgamo

Ceccherini, el gol en propia puerta de Koopmeiners y Scalvini marcaron el marcador de un partido dominado por los venecianos. Diosa cada vez más alejada de Europa

Podría haber sido mucho, probablemente será nada. Hablamos de la temporada del Atalanta, que tras haber saludado la Europa League también perdió 2-1 en casa con un Verona extraordinario, alejándose del área de Europa. El equipo de Gasperini, además de estar un poco implicado a nivel técnico, también parece un poco descargado anímicamente tras ver desvanecerse todos los goles de la temporada. Por otro lado, Verona está excelente: podría haberse ido del campeonato con la cabeza ya sin grandes goles, pero sigue haciendo grandes partidos.

EL PARTIDO

El primer toque es del Atalanta, pero Montipò supera por izquierda a Malinovskyi que había fallado Casale tras la asistencia de Zapata. Parece el modelo habitual de Atalanta que se aleja de los buenos tiempos, pero es un destello en la sartén. Verona crece, salta al campo y pone en crisis al equipo de Gasperini. El poste salva Musso en el recorte de Lazovic para Faraoni, Caprari pincha el larguero en una falta y Musso tiene cuidado con Simeone. El tema del incierto Piccinini no ayuda al Atalanta: la segunda amarilla a Gunter es más clara que la luz polar a mediados de junio, pero inexplicablemente se queda en el bolsillo del árbitro. Así que Tudor piensa en sacar del campo su tapón indultado, con Verona que sigue picando, pese a que Zapata toca la portería con la zurda. Y el gol al final de la primera parte es la justa recompensa: Caprari encuentra a Simeone, que no controla bien pero luego se la mete en la cabeza a Ceccherini, que acompaña la acción y supera a Musso. El juez de línea señala fuera de juego, anulado rápidamente por el Var.

SOLO VERONA

Gasp, que perdió a Malinovskyi por lesión (mal) sustituido por Miranchuk, intenta sacudir a la Diosa con Djimsiti, Muriel y Pezzella, pero se acentúa la brecha con Verona: Ilic cierra el uno-dos con Tameze, Grace Musso pero el rechazado por el El portero encuentra el desafortunado rebote en Koopmeiners para un autogol de 2-0. Atalanta se desvía: Lazovic la gracia, Lasagna encuentra el poste a Musso golpeado.

ORGULLO

Cuando todo parece terminado, Atalanta encuentra un poco de orgullo: una Muriel a veces irritante cruza por la cabeza de Scalvini, la última joya de una guardería inagotable. El joven defensa marca el primer gol en Serie A de una carrera que lo tiene todo para ser realmente importante y que pone algo de picante al final. Pero la derecha de Zappacosta remata alto y Verona celebra con todo el mérito.



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