La mezquita Al Mohsinien de Meppel y la mezquita As-Soennah de Assen han iniciado campañas de recaudación de fondos para los familiares y víctimas del terremoto de Marruecos.
“Las noticias sobre el terremoto están llegando con fuerza. Todo el mundo tiene familiares en esa zona”, afirma Nourdin El Kadi, secretario de la mezquita de Meppel. “Pero lo primero que me viene a la mente son las víctimas. Los pobres son los más afectados. Sus casas están construidas con barro, mientras que las casas de los ricos están hechas de piedra. Ya no queda nada de las casas de barro”.
El viernes por la noche, Marruecos fue azotado por un gran terremoto de magnitud 6,8 en la escala de Richter, justo al sur de Marrakech. Al menos 2.901 personas murieron. La Cruz Roja abrió el giro 6868 para donaciones. Hasta la fecha se han recibido casi 4 millones de euros.
3000 kilómetros
Después del terremoto, en la comunidad de Meppel surgió la idea de crear un punto de recogida en la mezquita. De martes a viernes, los iniciadores comunitarios están disponibles para recibir sacos de dormir, tiritas, pasta de dientes, toallas sanitarias y otros artículos que los residentes pueden donar.
Anis Jadib de Meppel colecciona analgésicos, multivitamínicos y sacos de dormir de su propia empresa. En pocos días recaudó miles de euros, unos 15 sacos de dormir y varias cajas de paracetamol. “Los medicamentos son bastante caros para todos y puedes poner un saco de dormir en cualquier lugar”, dice Jadib.
Dentro de dos semanas, Jadib recorrerá unos 3.000 kilómetros sólo hasta Marruecos para entregar los artículos en la zona afectada. Hace dos semanas todavía estaba de vacaciones en la zona. “Nos quedamos realmente impactados cuando lo escuchamos, porque conducíamos por la zona afectada. Es terrible ver cuánta tristeza están experimentando ahora los residentes allí”.
Un euro por habitante
Tras una llamada de la mezquita As-Sunnah de Assen, el municipio de Assen ha anunciado que pondrá a disposición de cada residente un euro. A principios de esta semana esto también se hizo en Amsterdam, Rotterdam y Eindhoven. “Todo el mundo ya está recaudando cosas, pero lo que realmente se necesita es dinero, para que la gente tenga dinero allí”, afirma Mohamed El Mourabit, presidente de la mezquita.