De bachillerato digital a bachillerato para la transición ecológica y digital (para afrontar los retos del Pnrr). Ahora volvemos a hablar de una escuela secundaria Made in Italy. La escuela italiana está viendo florecer muchos experimentos. Ciertamente, la escuela secundaria Made in Italy no nacerá en septiembre. Las palabras de Giorgia Meloni, en Vinitaly en Verona, desempolvan una propuesta de la campaña electoral, a la que siguió un proyecto de ley, firmado primero por la senadora de la Fdi, Carmela Bucalo, que perfila un poco los contornos de la delegación al gobierno para dar a luz a esta nueva escuela secundaria.
Los posibles sujetos (entre viejos y nuevos)
Italiano y matemáticas, por supuesto, pero también derecho, economía, idiomas. Las materias de estudio de la futura escuela secundaria Made in Italy son una mezcla, algunas horas más de algunas disciplinas, algunas menos y algunas nuevas entradas, técnicas avanzadas de marketing, modelos comerciales y protección de Made in Italy, así como estudios sobre el mercado internacional. “proteger la marca italiana”, a las políticas que sirven para salvaguardarla y al conocimiento de cómo se estructuran y funcionan las pequeñas y medianas empresas italianas. En resumen, la idea es crear profesionales que trabajen para promover y defender la excelencia italiana en el mercado global: expertos que puedan exportar y posicionar nuestra marca en el campo de la moda, las nuevas tecnologías, agroalimentario pero también en el cultural y turístico y puede contrarrestar eficazmente la competencia extranjera.
Los desbloqueos al final del bachillerato Made in Italy
Al finalizar este bachillerato, el estudiante podrá ingresar a la universidad, Economía, Mercadotecnia, Derecho serían las facultades más idóneas para profundizar los estudios o continuar la especialización con los ITS, los institutos técnicos superiores. “Tenemos carreras muy largas y el mundo del trabajo en cambio requiere una formación que se adapte rápido a los cambios que exige el mercado”, agregó Búcalo, quien también piensa en una reforma de los institutos agropecuarios “siempre para proteger nuestros productos”.
Largo recorrido (y obstáculos) para lograrlo
El mismo Ddl Bucalo prevé 12 meses para las disposiciones de aplicación. Luego está la necesidad de armonizar el nuevo bachillerato con los cursos existentes, por ejemplo el bachillerato de ciencias humanas, una opción económico-social. Sin mencionar la superposición con algunos cursos de educación técnica, que aún están a la espera de la reforma (prevista por el Pnrr). En resumen, la obra acaba de empezar. Pero la atención al made in Italy es fuerte. El Ministerio de Empresa y Made in Italy (Mimit) está estudiando un proyecto de ley sobre la valorización y protección del Made in Italy. Y no se excluye que también se pueda insertar algo “de la escuela”.