Gobierno, convenios colectivos y recortes de cuñas fiscales: el plan de ahorro salarial en dos pasos


El gobierno trabaja contra los números «dramáticos» de INPS e Istat sobre el mal trabajo y actuará en dos etapas: un decreto de verano, que probablemente llegue a fines de este mes, y la maniobra presupuestaria, que incluirá el esperado recorte de la cuña fiscal. Mario Draghi ilustró las pautas de actuación del ejecutivo a los sindicatos y se dispone a hacerlo a las empresas, pero también quiso intervenir en conferencia de prensa para asegurar el pleno compromiso del gobierno para enfrentar la nueva emergencia por los efectos de la inflación.

Convenios colectivos para introducir el salario mínimo

Los objetivos son dos: reducir la carga fiscal sobre las nóminas y asegurar la renovación de los contratos. Los convenios colectivos son precisamente la piedra angular que el gobierno ha identificado para implantar el salario mínimo europeo en Italia. La versión italiana no será un único umbral preciso, por lo tanto tampoco la base mínima de 9 euros calculada por el INPS y patrocinada por el Movimiento 5 Estrellas.

La idea es el Tec, el salario global, desarrollado por la ministra de Trabajo, Andrea Orlando: los salarios mínimos serán válidos por sector, con la aplicación de los contratos más difundidos a todos los trabajadores de los respectivos sectores. Al mismo tiempo, se buscará utilizar «formas de relevo» como estímulo a la calidad del trabajo y mecanismos de recompensa para apoyar el cierre de contratos aún no renovados, considerando que entre 6 y 8 millones de trabajadores están actualmente en mano una contrato vencido.

Nuevas intervenciones contra la energía cara

CGIL, CISL y UIL volverán a debatirlo en una nueva mesa que se convocará la última semana de julio con el objetivo de anticipar en la medida de lo posible las medidas y el marco normativo necesario para impulsar y proteger los salarios. El contenedor ya podría ser el próximo decreto «de cuerpo entero» en el que, sin nuevos desvíos pero en función exclusivamente de los espacios disponibles de las finanzas públicas, se renovarán también las intervenciones contra el encarecimiento de la energía, desde las facturas hasta los impuestos especiales (que, sin embargo, también podrían llegar por Decreto ministerial).

Recorte de la cuña fiscal en la maniobra

La maniobra debería encontrar espacio para recortar la cuña fiscal: también en este caso una medida estructural, ciertamente más amplia que la exención de cotizaciones lanzada este año para rentas de hasta 35 mil euros, costando a las arcas del Estado 1.500 millones. Las cifras que estamos discutiendo son decididamente más altas esta vez: Confindustria pide 16 mil millones, los sindicatos al menos el salario de un mes, por lo tanto 100-150 euros al mes, equivalente a unos 10 mil millones. Las cuentas se harán en la Nota a la Def y ahora es difícil hacer predicciones, pero para que la intervención sea perceptible para los bolsillos de los italianos no puede ser inferior a 5-6 mil millones.



ttn-es-11