Veintinueve artículos que pretenden promover el desarrollo de las zonas de montaña reconociendo su crecimiento económico y social como un “objetivo de interés nacional”. De ahí la nueva batería de prestaciones contra la despoblación y medidas para garantizar los servicios esenciales: incentivos para médicos y trabajadores sanitarios, profesores y empresarios menores de 41 años. El Senado aprobó el proyecto de ley en primera lectura con 77 sí, 5 en contra y 45 abstenciones de la ley de montaña. aprobada en el Consejo de Ministros el pasado mes de febrero y fuertemente apoyada por el Ministro de Asuntos Regionales, Roberto Calderoli, según el cual “se trata de un primer resultado concreto e importante en interés de estos territorios, de los ciudadanos que allí residen y de todos aquellos que pretenden invertir en el potencial de la montaña. Están disponibles más de 200 millones del Fondo para el desarrollo de las montañas italianas (Fosmit), lo que supone un buen punto de partida”. Demasiado poco para la oposición, que habla de una “bolsa vacía que se hace pasar por un punto de inflexión histórico”.
La clasificación de los municipios de montaña.
La intención general del proyecto de ley es luchar contra la desertificación de las actividades comerciales y productivas, promoviendo la digitalización, apoyando el medio ambiente y reforzando las garantías de acceso a los servicios públicos, desde la educación hasta la sanidad, desde las oficinas de correos hasta los bancos. Pero la primera tarea que la disposición confía a un decreto del Presidente del Consejo de Ministros es taxonómica: en un plazo de 90 días a partir de la entrada en vigor del texto será necesario establecer los criterios para la clasificación de los municipios de montaña. con base en los parámetros altimétricos y de pendiente, y aprobar el listado, el cual será actualizado antes del 30 de septiembre de cada año. Con un nuevo Decreto del Primer Ministro, que se actualizará al menos cada tres años, se identificarán los criterios para indicar qué municipios son beneficiarios de las medidas de apoyo previstas.
La delegación para la reorganización de beneficios
Con una enmienda presentada en el Palacio Madama, el proyecto de ley delega al Gobierno en un plazo de doce meses la tarea de reorganizar, integrar y coordinar la legislación vigente en materia de incentivos, incluidos los fiscales, en favor de los municipios de montaña. Corresponde al Ministro de Asuntos Regionales lanzar cada tres años la Estrategia para las montañas italianas, que indica las prioridades y orientaciones de las políticas para las zonas de montaña, teniendo en cuenta las estrategias regionales. El Fondo de referencia es el para el desarrollo de las montañas italianas, establecido por la ley presupuestaria para 2022, con una dotación de 200 millones a partir de 2023. A partir de 2025, el Fondo financiará tanto las intervenciones competencia de las Regiones y de los entes locales como los de competencia estatal, en particular en la aplicación de la Estrategia. La distribución se realizará siempre mediante decreto ministerial. Los recursos – especifica el proyecto de ley – son adicionales a cualquier otra transferencia ordinaria o especial del Estado y a cualquier otro beneficio fiscal en favor de las autoridades locales o de los ciudadanos o de las políticas de montaña, así como a las transferencias de fondos de la UE.
Incentivos para médicos y trabajadores sanitarios
Por cada año de actividad realizada en la sanidad de montaña, el proyecto de ley establece asignar a las profesiones y agentes sociosanitarios una doble puntuación para la evaluación de las cualificaciones profesionales en los concursos del Servicio Nacional de Salud y una vía preferente, en el ámbito de los convenios colectivos nacionales. , para la asunción de tareas dentro de hospitales y autoridades sanitarias locales. No sólo eso. La actividad desempeñada por los médicos en las estructuras sanitarias y sociosanitarias de las zonas de montaña durante al menos tres años constituye una cualificación preferente, en igualdad de condiciones, para los puestos de director sanitario. Para quienes se desplacen a trabajar a un municipio de montaña, se realizará una aportación para el alquiler, en forma de crédito fiscal, igual a la menor cantidad entre el 60% del alquiler anual del inmueble y la cantidad de 2.500 euros. El mismo beneficio se concede a quienes adquieren un inmueble mediante la contratación de una hipoteca, siempre igual a la menor cantidad entre el 60% del importe anual del préstamo y la cantidad de 2.500 euros. El tope de esta partida es de 20 millones brutos anuales y el beneficio no es acumulable con otras deducciones sobre préstamos hipotecarios. Un decreto interministerial definirá los criterios y métodos para la concesión del crédito fiscal.
Llega una asignación ad hoc: el límite es de 20 millones brutos al año
A los empleados, directivos y médicos generales que trabajan en las estructuras del SNS en los municipios de montaña, en el ámbito de los contratos colectivos de trabajo y convenios colectivos nacionales, se les proporcionará un emolumento, de carácter accesorio y variable, que se atribuirá en función de la situación real. presencia en servicio, siempre dentro de los límites del importe bruto anual global de 20 millones de euros al año a partir de 2025. Un decreto del Ministro de Sanidad distribuirá los fondos. En el expediente de los técnicos del Senado se constata que el informe técnico no aporta elementos que permitan “verificar la suficiencia de los créditos”. En cualquier caso, en el caso de los créditos fiscales, con un valor medio del beneficio concedido igual a 2.500 euros al año, el acceso estaría garantizado a aproximadamente 8.000 sujetos. En cuanto a la asignación, considerando el público compuesto por empleados del NHS y médicos generales (alrededor de 650.000 a nivel nacional) y suponiendo la coincidencia de los municipios seleccionados con todos los municipios de montaña (por tanto desde una perspectiva extremadamente prudencial), la remuneración debería ser entre 300 y 400 euros al año.